La empresa estatal Fabricaciones Militares lanzó un programa de ajuste para reducir en un 20% la cantidad de trabajadores, en sus unidades ubicadas en Río Tercero y Villa María, en Córdoba. Prevén retiros y jubilaciones anticipadas. 

La motosierra de Javier Milei pretende sacar 288 empleados mediante esta vía, algo ya rechazado por el gremio Asociación Trabajadores del Estado (ATE), y además, teme que haya despidos si no se llega a ese número de desvinculaciones.

Fabricaciones Militares planteó que “está atravesando un proceso que tiende a encontrar el punto de equilibrio para la eficiencia productiva. En este sentido, hay un reordenamiento necesario en varios frentes y esfuerzos asumidos por parte de la dirección en asegurar la sostenibilidad de la compañía, entre ellos los programas de egreso voluntario que dan a los empleados opciones para elegir una salida voluntaria y consensuada con la empresa”, indica un documento con la firma de Hugo Pascarelli, el presidente del directorio designado por la gestión libertaria-macrista.

Cabe recordar que Fabricaciones Militares -aunque en un principio estaba en la lista de empresas que el Gobierno quería privatizar-  finalmente quedó excluida de esa lista en la “ley ómnibus” que debate el Congreso.

El repudio de ATE

Integrantes de la conducción gremial expresaron que “rechazan de manera categórica” estas medidas, que consideraron que “son operaciones de despidos encubiertos y un plan de vaciamiento del Estado”.

Foto: fm.gob.ar
Foto: fm.gob.ar

En un comunicado, ATE Villa María apuntó que “el ofrecimiento es consecuencia de un burdo intento de comenzar a reducir personal de manera engañosa”. Y añadió que “por el convenio colectivo de trabajo, al gobierno se le dificultará despedir trabajadores tan impunemente”.

Por su parte, ATE Río Tercero remarcó que esta sede cordobesa no es deficitaria y que tiene el personal necesario para los trabajos que se realizan en producción química y metalmecánica.

Lo paradójico es que, según fuentes gremiales, en la actualidad hay actividad en todos los establecimientos: en el de Santa Fe, por ejemplo, con el objetivo de reforzar su custodia presidencial y evitar robos por parte de bandas narco, se producen municiones, armas y chalecos.

Cómo es el ajuste que está en marcha

De acuerdo a un comunicado publicado por La Nación, el directorio de Fabricaciones Militares, pretende dar de baja 288 empleados por acuerdos “consensuados”, algo que  implicaría un desembolso estimado en 1.914 millones de pesos.

La planta de Río Tercero es la que ocupa más personal: 384 empleados. Cabe remarcar que en esa ciudad se producen químicos (la mayor parte para industrias privadas), siendo esa unidad la más rentable. Además, cuenta con talleres metalmecánicos que, entre otras tareas, repara vagones ferroviarios.

En Villa María, Azul y Jachal se producen pólvoras y explosivos (en su mayor parte con destino a la actividad minera). La planta de Santa Fe fabrica municiones de uso policial, militar y civil.

En la sede central en Buenos Aires está el directorio y áreas administrativas y comerciales.

Las jubilación anticipadas se ofrecerían serían para los hombres que se acerque a los 65 años y mujeres a los 60. Fuentes gremiales señalaron que la oferta sería sostener un sueldo por hasta 60 meses y el pago de los aportes hasta la jubilación efectiva. El gremio ya anticipó que sus áreas legales están analizando la legalidad de la propuesta, aún no formalizada.

Para los retiros, en tanto, el plan seria el pago de un salario neto (no bruto) por año, con cifras que dependen de la remuneración y de la antiguedad de cada trabajador. De todos modos, la propuesta no está aún oficialmente lanzada.

Es importante enfatizar que el ajuste en esta área se viene dando hace tiempo: de las 14 plantas que décadas atrás supo sumar Fabricaciones Militares, hoy quedan en actividad sólo cinco unidades: Río Tercero y Villa María (en Córdoba), Azul (en Buenos Aires), Fray Luis Beltrán (en Santa Fe) y Jachal (en San Juan). Además, suma la sede central en Ciudad de Buenos Aires.