Atentado a la AMIA: 30 años de impunidad, dolor y corrupción
El 18 de julio de 1994, un coche bomba explotó Pasteur 633, sede de la mutual judía en la ciudad autónoma de Buenos Aires. El ataque mató a 85 personas y 300 heridos. La investigación por los responsables del atentado estuvo teñida de corrupción y encubrimientos.
Hace 30 años, ocurrió el atentado a la sede de la Asociación Mutual Israelita Argentina (AMIA) en Buenos Aires.
El 18 de julio de 1994, cuando Carlos Menem era el presidente de Argentina, un coche bomba explotó Pasteur 633, sede de la mutual judía en la ciudad autónoma de Buenos Aires, derrumbando el edificio y provocando la muerte de 85 personas y dejando a otras 300 personas heridas, sobrevivientes de la tragedia.
Las investigaciones y juicios sobre el atentado estuvieron teñidas de corrupción, pactos oscuros y encubrimientos. Hasta el día de hoy, familiares de las víctimas no pudieron encontrar consuelo en el Poder Judicial argentino.
“Para nosotros no hubo modificaciones”, expresó en Radio Universidad Adriana Reisfeld, presidenta de Memoria Activa, organización que busca esclarecer el atentado de la AMIA y la embajada de Israel.
En el 30º aniversario del atentado, Luis Czyzewski expresó en Radio Universidad: “hoy es un día especial. Muy difícil. Lamentablemente hace 30 años que estamos pasando días difíciles”.
Czyzewski perdió a su hija Paola en el atentado y lucha por esclarecer el caso participando en la Asociación Familiares y Amigos de las Víctimas del Atentado a la Amia.
Y agregó: “No hay un aniversario que termina en cero. Todo se potencia, todo se amplifica. Para los familiares, 30 años es igual a 29, 25 o cualquiera de los años que pasaron”.
“En mi caso, yo siento que el mandato de Paola que siento que permanentemente me dice "seguí papá" hace que siga peleando hasta que la fuerza me dé. Hace 30 años que estamos peleando. Los sinsabores fueron muchos. Los resultados positivos son muy pocos”, expresó.
Reisfeld también mostró indignación sobre la impunidad del caso. “Después de tantos años, no solo la bomba mató a nuestros familiares, sino el encubrimiento. A raíz de la mala investigación y los pactos del exjuez Juan José Galeano y los exfiscales hubo un pacto para que no se sepa la verdad”, remarcó.