Bancos argentinos reclaman que el Gobierno lidere una lucha nacional contra el efectivo
“El uso del dinero en efectivo nos causa más daño como sociedad del que nos damos cuenta", dijo Javier Bolzico, presidente de la asociación que nuclea a las entidades. En qué consiste la propuesta.
La Asociación de Bancos Argentinos (Adeba) consideró que el gobierno de Alberto Fernández debe iniciar una lucha contra el uso de dinero efectivo en cualquier tipo de transacción. En ese marco, el pasado miércoles presentó la Iniciativa Dinero Digital en Argentina (IDDA), cuyo objetivo central es avanzar en la sustitución del dinero en efectivo por el dinero digital.
La propuesta convoca actores públicos y privados, entre ellos, a las autoridades nacionales, provinciales y municipales, a los bancos y otros proveedores del sistema de pagos, a los administradores de distintas operaciones financieras, a los usuarios y a toda la sociedad.
Según se informó, a pesar de los avances en la digitalización de los pagos y transacciones comerciales, Argentina sigue teniendo un uso muy alto de dinero en efectivo
Las razones para dar lucha contra los billetes
Javier Bolzico, presidente de Adeba, indicó que "el uso del dinero en efectivo nos causa más daño como sociedad del que nos damos cuenta: informalidad, inseguridad, exclusión financiera e impacto ambiental son solo algunos de sus efectos”. Y agregó: “El Gobierno, el sector privado y la sociedad en su conjunto deben trabajar en forma coordinada con el objetivo de disminuir el uso del dinero en efectivo”.
"El dinero digital es más práctico, económico, seguro y amigable con el medio ambiente, que el dinero papel", agregó el banquero.
Según la entidad, el uso extendido del efectivo en el país tiene muchas causas, como la informalidad económica, las distorsiones por políticas impositivas, las regulaciones del Banco Central, como así también la falta de una estrategia nacional y coordinada de lucha contra su utilización.
De acuerdo a lo informado, en marzo, se extrajeron de los cajeros automáticos (ATM) del sistema $900.000 millones. En tanto que los retiros por ventanilla en sucursales sumaron otros $600.000 millones, totalizando un retiro total de $1.500 mil millones. Eso equivale a 1.500 millones de billetes de $1.000, tan sólo en un mes.
Por otro lado, los depósitos realizados en dicho mes en efectivo ascendieron a $1.800 miles de millones.
Las principales consecuencias del uso del dinero físico según ADEBA
1) El uso de efectivo favorece la informalidad de la economía. Los pagos no son trazables ni quedan registro de los mismos, excepto que así lo decidan los participantes de las transacciones. El efectivo facilita y promueve operaciones no formales de la economía, asociadas con la evasión fiscal y contrataciones “en negro”.
2) También genera altos costos de emisión y destrucción de dinero por parte del BCRA. Durante 2020, sólo los gastos en materiales para emisión monetaria, ascendieron a US$ 118 millones. A esto se debe adicionar los gastos de atesoramiento, transporte y destrucción del efectivo.
3) Aumenta el costo operativo a la actividad financiera por la recepción, clasificación, acondicionamiento, atesoramiento y transporte de billetes. El costo de transporte de dinero es uno de los principales rubros de gastos de las entidades financieras.
4) Genera un alto impacto negativo a nivel ambiental: el proceso de creación, manipulación, traslado y disposición del dinero es altamente contaminante. Un trabajo del Banco Central Europeo estimó que la huella de carbono asociada al uso de los billetes de Euro equivale al consumo de una lámpara de 60 watts o el recorrido de 1 km en auto a gasolina por cada uno de los habitantes en la zona euro. Si se extrapola esa cifra a Argentina, la huella de carbono que por año causa el uso del efectivo en Argentina es equivalente a tener 20.000.000 de lámparas encendidas un día o que un auto realice 1.000 vueltas a la tierra.
5) Expone a las personas y a empresas a sufrir la delincuencia en ocasión de robo, que en varias oportunidades constituyen delitos graves y hasta pueden ocasionar muertes.
6) Dificulta la inclusión financiera de personas y empresas ya que no ingresan al circuito financiero formal y de esa forma quedan excluidos. Además, son marginados de los beneficios que genera la inclusión financiera y se mantienen en un estado de vulnerabilidad.
7) Atenta contra la bancarización de la economía, porque el uso del dinero en efectivo, hace que una parte importante del ahorro se mantenga atesorada en los hogares, en lugar de estar en forma de depósito bancario. Estos determinan la “capacidad prestable” del sistema financiero, que es lo que determina el nivel de préstamos.
ADEBA considera que están dadas las condiciones tecnológicas y de acceso a cuentas bancarias o de otros proveedores para que la mayoría de los pagos puedan hacerse de manera digital.
La propuesta para pasar al uso de dinero digital
La entidad que agrupa a los bancos argentinos propone reducir el ICD en las transferencias que no involucran dinero en efectivo y que no superen $1.000.000. Además, reducir las percepciones y retenciones de IIBB, IVA y Ganancias sobre tarjetas de débito y crédito. Por último, sugiere extender la devolución de IVA para todos los pagos con tarjeta de débito, por hasta $ 1.000.000 por mes.
Entre las medidas que involucran al BCRA, proponen limitar la gratuidad de los depósitos en efectivo solo a operaciones de hasta $1.000.000 y de las extracciones de efectivo sólo a operaciones de hasta $150.000.
También propone ampliar el alcance de los medios de pago a través del QR interoperable actual a pagos con tarjetas de crédito en un pago, en cuotas o planes Ahora y tarjeta de débito y además, crear un central de prevención de fraude digital.
Para dar impulso al uso del dinero digital en transacciones, la entidad promueve:
-Digitalizar los pagos de las personas con asistencia social (se podrá extraer solo el 20% en efectivo) y de las tasas municipales.
-Limitar los pagos en efectivo en estaciones de servicio y en los supermercados a $5.000.
-Extender los medios de pago electrónicos bancarios a todos los medios de transporte y servicios públicos.
-Pago de escrituras inmobiliarias con dinero electrónico y de expensas.
-Disponer el pago de sentencias en el ámbito judicial a través de medios de pago electrónicos.
-Obligatoriedad del pago de las remuneraciones al personal empleado en casas particulares a través de cuentas admitidas por la normativa vigente.
-Limitar los pagos en efectivo en centros de pagos a $5.000.
Fuente: eleconomista.com.ar