Con la Ley Bases ya aprobada después de meses de negaciones, la Cámara de Diputados retoma su propia agenda y uno de los temas que vuelven a discutirse es el de la reducción de la jornada laboral.

La comisión de Legislación del Trabajo, que preside Martín Tetaz, citó para este martes a una reunión informativa desde las 11 para darle continuidad a este rico debate que busca modificar la Ley 11.524 que está vigente desde 1929.

En la última reunión, que se llevó adelante el 6 de junio pasado, expusieron sus puntos de vista: abogados laboralistas, empresarios y representantes de organizaciones sindicales.

En esta oportunidad se buscará avanzar en el tratamiento de nueve proyectos de ley que la Cámara Baja comenzó a analizar desde octubre de 2023. Los textos son impulsados por Unión por la Patria, el radicalismo, el Frente de Izquierda y el socialismo santafesino.

La normativa vigente desde hace casi un siglo establece jornadas laborales de un máximo de 48 horas semanales y hasta 9 horas por día.

La pregunta que es eje de este debate se formula en dos partes: cómo funcionó en otros lugares del mundo y si con nuestra idiosincrasia, podrían transpolarse los modelos que hayan funcionado de manera positiva.

Antecedentes de un debate que no es nuevo

Esta es la tercera vez que el Congreso nacional aborda la propuesta de reducir la jornada laboral. Qué dice el proyecto del radical Martín Tetaz.

La actual legislación que establece jornadas laborales de un máximo de 48 horas semanales y hasta 9 horas diarias de trabajo, es una de las cargas horarias más exigentes de América Latina y el mundo.

Los argumentos utilizados en otros continentes y en varios países de estas latitudes para impulsar reformas que acortaron la jornada laboral, son de los más diversos y a la vez orientados a partir de varios objetivos.

Se mencionan entre otros, la posibilidad de ampliar el mercado formal de trabajo y la cantidad de trabajadores, la reducción del estrés laboral, un mejor balance entre la vida personal y la laboral, y una mejora del rendimiento y la productividad.

En Argentina esta es la tercera vez que el Congreso aborda la propuesta de reducir la jornada laboral, ya que en 2015 tuvo dictamen, pero nunca se trató en el recinto de Diputados.

En 2016 se volvió a la cámara para debatir estas iniciativas en diferentes reuniones informativas en las cuales participaron autoridades nacionales, provinciales, organizaciones sindicales y empresariales.

Los proyectos a debatir

Desde UP, el del diputado nacional Hugo Yasky -secretario general de la CTA-, presentó un texto que establece que la jornada laboral no se exceda de las 8 horas diarias y las 40 semanales, sin disminución del salario que los trabajadores estén percibiendo en el momento en que se reduzca la duración del trabajo.

Por su parte, el diputado nacional Sergio Palazzo, secretario general de la Asociación Bancaria, propone que la jornada laboral tenga un máximo de 8 horas diarias, pero que no exceda los cuatro días a la semana, o sea 32 horas semanales.

Los proyectos de Eduardo Valdés (UP – CABA), Nicolás Del Caño y la ex diputada Claudia Ormachea pretenden días laborales de 6 horas o 30 horas a la semana, mientras que los proyectos de Mónica Litza y el socialismo plantean que no se excedan las 36 horas semanales.

¿Llevarse trabajo a casa?

En el marco del debate por la reducción de la jornada, también se incluye en el temario, la cuestión de cuántas horas debe estar conectada una persona con su trabajo y en disponibilidad de responder cuestiones laborales.

Al respecto, el proyecto de Vanesa Siley establece el derecho a la “desconexión digital” referido a la limitación de la disponibilidad de la persona trabajadora en horarios que excedan la jornada laboral a través de dispositivos digitales y/o tecnologías de la información y comunicación, a fin de garantizar el pleno ejercicio de su tiempo de descanso.

Indemnizaciones por despidos

Si bien hay un antecedente que ya fue aprobado por Diputados en 2014, pero no fue tratado en el Senado y perdió estado parlamentario, el proyecto de Sergio Palazzo para modificar el artículo 19 del Régimen de Contrato de Trabajo aprobado por la Ley 20.744, implementa indemnizaciones en los casos de despidos cuando no se cumple el plazo de preaviso.

Desde la UCR impulsaron las iniciativas de Martín Tetaz y de Julio Cobos, aclarando que la iniciativa presentada por el economista radical ya había sido tratada por esta comisión en los períodos 2015 y 2023, pero finalmente nunca tuvo despacho. Este nuevo texto unificaría ambos proyectos.

El proyecto del mendocino Cobos, impone la efectivización de las propinas a través de pagos con tarjeta de crédito, tarjeta de débito, billeteras virtuales o cualquier otro medio de pago físico o electrónico.

Fuente: La Capital y La Voz