Fernández y Biden se reúnen este miércoles en la Casa Blanca
Dentro de los principales temas que abordarán se encuentran: los efectos económicos negativos generados por la sequía en el país, el cambio climático, tecnología, inclusión, democracia y derechos humanos.
El presidente Alberto Fernández celebrará este miércoles una reunión bilateral "a agenda abierta" con su par estadounidense, Joe Biden, en la que se plantearán los efectos económicos negativos generados por la sequía en el país y se analizarán asuntos de interés bilateral como el cambio climático, tecnología, inclusión, democracia y derechos humanos.
El encuentro se realizará a las 14.45 hora local (15.45 de la Argentina), en el Salón Oval de la Casa Blanca, bajo el sistema 1+1, es decir solo con la presencia de ambos mandatarios, y luego se hará una declaración a la prensa.
Posteriormente se entrevistarán los miembros del resto de las delegaciones de ambos países.
Por la Argentina estarán los ministros de Economía, Sergio Massa, y de Seguridad, Aníbal Fernández, quienes viajaron en forma directa a Washington, informaron fuentes de la Presidencia argentina.
También se sumarán el canciller Santiago Cafiero; el secretario General de la Presidencia, Julio Vitobello; la portavoz de la Presidencia, Gabriela Cerruti; los jefes de Gabinete de Cancillería, Luciana Tito, y de Economía, Leonardo Madcur, y el embajador argentino en Estados Unidos, Jorge Argüello.
La comitiva estadounidense estará compuesta por el secretario de Estado, Antony Blinken; la secretaria del Tesoro, Janet Yellen; el asesor de Seguridad Nacional, Jake Sullivan; el subsecretario de Estado para el Hemisferio Occidental, Brian Nichols; el asesor especial para América Latina, Juan González; el encargado de Argentina y Cono Sur, Lorenzo Harris; y el embajador de Estados Unidos en Argentina, Marc Stanley.
"La verdad es que son los funcionarios más importantes del Gobierno de Estados Unidos, así que estamos muy conformes", resaltaron en la delegación argentina, según informó Daniel Scarímbolo, enviado especial de Télam.
Es sabido que Estados Unidos no tiene intenciones de cambiar su sistema financiero, pero el jefe de Estado argentino sabe de la posición "influyente" que tiene Washington en los organismos multilaterales de crédito.
No obstante, las fuentes aclararon que "es una reunión de dos presidentes para hablar de distintos temas, no el pedido de cosas de uno sobre otro".
En el Gobierno remarcan que la Casa Blanca "quiere la estabilidad económica" del país y valora que la Argentina "sea un pilar de estabilidad en la región, política e institucional".
Además, Fernández y Biden "celebrarán los 200 años de relaciones bilaterales" y "reiterarán la solidez de la asociación entre Estados Unidos y Argentina" con una agenda que abordará cómo "continuar asociándose para abordar los desafíos globales", según anunció el domingo por la noche la Casa Blanca desde su sitio oficial, a través de un anuncio de la secretaria de prensa de la administración demócrata, Karine Jean-Pierre.
En el temario a tratar por los dos jefes de Estado aparecen "los minerales críticos, el cambio climático, el espacio y la tecnología", como también "la cooperación económica" y los "valores compartidos de inclusión, democracia y la protección de los derechos humanos", amplió la vocera.
Fernández dialogó con su par del Gobierno de España, Pedro Sánchez, en la reciente XXVIII Cumbre Iberoamericana de Jefes y Jefas de Estado y Gobierno en Santo Domingo, República Dominicana, precisamente sobre "cómo terminan los bancos" en "un sistema agotado que cada 15 años nos pone a todos en ascuas", sostienen cerca del mandatario argentino.
Lo dicen en referencia a las “burbujas financieras que buscan el socorro al estallido”.
Inclusive, el Alto Representante de la Unión Europea para Asuntos Exteriores y Política de Seguridad, Josep Borrell, tomó en su discurso "muchas de las cosas" que dijo el Presidente argentino, porque compartió la mirada "del cambio en la globalización", apuntaron las fuentes, con una frase resonante en la que señaló que "la búsqueda de mano de obra barata salió muy cara".