Tras la brutal represión del sábado último en Jujuy, en esta jornada fueron liberadas las 21 personas que se encontraban detenidas en las unidades penales de la región.

La medida se llevó a cabo durante la noche del día de ayer y la madrugada de hoy, lo que ha permitido que ninguna persona permanezca detenida tras la violenta represión policial que tuvo lugar el pasado sábado en la localidad de Purmamarca.

Las ocho mujeres y 13 hombres habían sido detenidos en las unidades penales de Alto Comedero, en la capital jujeña, y quedaron imputados por el artículo 194 del Código Penal, que prohíbe los cortes de vías de comunicación. 

La policía jujeña reprime a los manifestantes en Purmamarca. Foto: Edgardo Valera/Télam

Desde el Frente de Izquierda, Natalia Morales, una de las detenidas, denunció que todos ellos fueron aprehendidos por defender los derechos indígenas y el agua.

Entre los liberados se encuentran el periodista jujeño Camilo Haro Galli, el turista Hernán Oviedo, el vocal de la comisión municipal de El Moreno, Santiago Lamas, y la estudiante universitaria, Carmen Benicio, residente de la comunidad de Quebraleña.

El Sindicato de Empleados y Obreros Municipales de Jujuy emitió un comunicado en el que exige la anulación de la reforma constitucional de la provincia y la convocatoria al diálogo con los docentes, los pueblos originarios, los municipales y los estatales. Además, solicitan el cese de la represión de la protesta legítima.

El secretario de Derechos Humanos de la Nación, Horacio Pietragalla Corti, se encuentra en la provincia y ha visitado a todos los detenidos en la represión. Luego, se dirigió a la ruta nacional 9, en la entrada a Purmamarca, donde continuaba la protesta de las comunidades indígenas contra la reforma constitucional aprobada recientemente.

El pasado sábado, efectivos de Infantería de la policía jujeña reprimieron en cuatro ocasiones a manifestantes que cortaban el tránsito en la intersección de las rutas 9 y 52, a la altura de Purmamarca. 

Durante la represión, se registraron heridos con balas de goma, siendo Mijael Lian Lamas, de 17 años, uno de los más afectados, quien sufrió la pérdida de un ojo debido al impacto de una bala de goma disparada por un efectivo policial.

La represión tuvo lugar en medio de las protestas de comunidades originarias y organizaciones sociales en el norte de Jujuy, en rechazo a la reforma parcial de la Carta Magna provincial que fue aprobada por una Asamblea Constituyente.