Este jueves, trabajadores de la salud privada protagoniza un paro de 24 horas con suspensión de actividades, cubriendo solo las guardias mínimas y urgencias. Es "en defensa de la recomposición paritaria de los salarios" y ante "la ausencia de avances en las negociaciones convencionales con las cámaras". 

La Federación de Asociaciones de Trabajadores de la Sanidad Argentina (FATSA), presidida por Héctor Daer, lleva adelante esta medida de fuerza en medio de una negociación salarial. 

Afecta a principalmente al "sector asistencial" de clínicas, sanitarios, hospitales particulares, instituciones mutuales, institutos médicos de diagnóstico, de análisis clínicos, de consultorios médicos, de clínicas psiquiátricas, geriátricos, emergencias médicas e internación domiciliaria.

No obstante, confirmaron que "se cubrirán las guardias mínimas y se atenderán de forma exclusiva las emergencias". Además, los trabajadores tienen previsto para hoy la realización de acciones de visibilización de las protestas tanto en el hall o en las puertas de ingreso de cada establecimiento asistencial, en todo el país. 

Desde el sindicato precisaron que "el reclamo salarial es urgente y se impone proteger los ingresos" del personal. En este sentido, destacaron: "Todavía no hemos podido cerrar la actualización salarial del 2023 y los índices de inflación de enero pulverizaron el poder de compra de los salarios de toda la actividad".

En tanto, el cotitular de la CGT y dirigente de Sanidad, Héctor Daer, ratificó ayer en un documento "el compromiso del gremio con la defensa de los derechos de los trabajadores de la salud", y exigió de forma urgente a las cámaras patronales que "se avengan a una recomposición justa".

“Ante la intransigencia de las cámaras empresarias, la Fatsa convocó al paro”, dijo tras resaltar que "sin salario no hay salud".