Luego de los fuertes incrementos que tuvieron los precios de los combustibles que alcanzaron el 140% en los últimos dos meses, el consumo registró una caída del 20% promedio en todo el país, según informa este jueves el diario perfil.com, citando fuentes del sector energético.

La desregulación de los precios que implementó el gobierno de Javier Milei dejó de lado las subas programadas por la gestión de Alberto Fernández.

Pese a la baja en las ventas, el presidente de la confederación de estaciones de servicio aseveró que todavía "puede haber algún aumento más".

En diálogo con perfil.com, el gerente general de la Confederación de Entidades de Comercialización de Hidrocarburos y Afines (CECHA), Guillermo Lego, aseguró que desde mediados de diciembre y en lo que va de enero, las estaciones de servicio de distintas provincias registraron una caída generalizada del 20% en sus ventas.

La liberalización de las normativas del rubro suprimieron el barril criollo y la diferencia con el crudo internacional tiende a desaparecer. "El productor ahora le va a cobrar al refinador aproximadamente el valor internacional menos el costo del seguro, del flete, etcétera. Entendemos que todavía puede haber un reajuste allí", remarcó Lego.

Durante 2023, las remarcaciones de los valores de los combustibles superaron el 260% y quedaron por encima del nivel general del Índice de Precios al Consumidor (IPC) que dará a conocer el Instituto Nacional de Estadística y Censos (INDEC) en las próximas horas.

Por cada 10% de incremento de las naftas y el gasoil, el IPC aumenta un 0,4% de forma directa. Tanto en diciembre como en enero, el porcentaje tendría una importante incidencia debido a los sucesivos ajustes implementados por las petroleras.