Las leyendas del Rally en Villa Carlos Paz
Este sábado 12 de noviembre Villa Carlos Paz será epicentro de la Fiesta del Día del Navegante con la asistencia de casi 30 autos de la era más gloriosa del rally, con la presencia de estelar del Lancia Delta original con el que ganaron el Rally Argentina 1988 Jorge Recalde y Jorge Del Buono.
El rally forma parte del ADN de los cordobeses en particular y los argentinos en general. Esta especialidad del deporte motor tuvo a Jorge Recalde y Jorge Del Buono como ganadores de la edición del año 1988 del rally escenificado en la geografía de nuestra provincia. Una rara simbiosis entre deporte, amistad y experiencia religiosa hacia que año tras año Córdoba se convirtiera en la Capital Mundial del rally. Seguramente a más de uno se le caerá unas lágrimas recordando los momentos vividos en cada edición del rally y sus retinas tendrán grabadas ese derrape, ese asado, esa tierra y ese fernet que hace algunos años ya no podemos disfrutar.
Pero este fin de semana Villa Carlos Paz brillará con luz propia con esos rallies de hace una par de décadas que jamás olvidaremos con un desfile de los autos de aquella época. Este sábado 12 de noviembre a las 18, los autos de las Leyendas del Rally estarán exhibidos en el ingreso a Carlos Paz por la avenida San Martín, con la presencia estelar del Lancia Delta original, ganador del Rally Argentina de 1988.
Luego, por el centro de Villa Carlos Paz, este domingo 13 de noviembre a las 11.30 cerca de 30 autos pasearán por el centro de Villa Carlos Paz haciendo recordar las memorables épocas del Rally de Argentina que tenía por epicentro a la perla del Valle de Punilla.
En 1979, Lancia sorprendió con la presentación del modelo Delta, un compacto de tracción delantera basado en el Fiat Ritmo. En 1983 apareció la primera apuesta deportiva seria, el Lancia Delta HF de 130CV. Apenas tuvo repercusión en la competición ya que todos los esfuerzos de Lancia se centraban en aquella época en el Lancia 037 que se medía en el Campeonato del Mundo de Rallyes con otros Grupo B como el Audi Quattro o el Renault 5 Turbo. En 1.985 apareció la versión de competición Delta S4, que poco tenía que ver con el Lancia Delta de serie, homologada para el Grupo B y destinada a sustituir al ya obsoleto Lancia 037 de propulsión trasera. Ese auto marcó una época en el mundo del rally y fue el antecedente para que en 1988 Jorge Recalde y Jorge Del Buono pusieran a nuestro país en el sitial más alto del podio en el Rally Argentina.
Es importante recordar que en 1986, el Jefe de Departamento Deportivo de Lancia, Cesare Fiorio, le daría la posibilidad de conducir un Lancia Delta S4 del equipo oficial Martini Racing, acompañado por compañeros de equipo de renombre como el italiano Massimo Biasion y el finés Markku Alén. Al final de la carrera a pocos kilómetros de finalizar, una pinchadura lo dejaría en la cuarta plaza a 1 min 33 s de Stig Blomqvist. Este resultado le abriría las puertas a futuro a formar parte del equipo oficial Lancia. Fue el único americano que venció en la clasificación general del Rally de Argentina en 1988, junto a su navegante de siempre Jorge Del Buono, quien justamente cumplirá 78 años este fin de semana y se establecerá el 13 de noviembre como el “Día del Navegante” de rally. Señores se viene un fin de semana a pura fiesta. A disfrutarlo.
Se trataba de una evolución del concepto del Lancia 037. La cabina monocaso fue sustituida por un chasis tubular que sustentaba un subchasis delantero y otro trasero. La versión de competición estaba cubierta por una carrocería de kevlar y fibra de carbono mientras que la versión de calle Stradale se conformaba con una de fibra de vidrio. También denominado proyecto 038/040, la S hacía referencia a su motor sobrealimentado (Supercharged) y el 4 a sus cuatro ruedas motrices, principales ventajas respecto al 037. Contaba con un compresor Volumex desarrollado por Abarth que mejoraba el comportamiento en bajas y se desconectaba cuando entraba el turbo KKK K27. La entrega de potencia era brutal y el bloque de 1,8 litros declaraba 480 CV que le permitiían acelerar de 0 a 100 km/h en tan sólo 2,3s. Se dice que en cierta ocasión, durante unos test, los mecánicos elevaron la presión de soplado desde los 2,2 bar originales hasta los 5 bar, obteniendo un potencia de más de 900CV.