Hace tiempo que el Subaru Impreza dejó de ser un compacto con versiones casi listas para ir a la pista o los rallý para convertirse en un discreto hatcback más orientado a la eficiencia y la practicidad que a la deportividad. Con 30 años en sus espaldas, el nuevo Impreza se mantiene fiel al motor Boxer y al sistema AWD simétrico, pero suma nuevo estilo, más tecnología y mayor performance incluyendo a la variante deportiva RS.

La marca japonesa presentó en Estados Unidos, en el Salón del Automóvil de Los Ángeles, al nuevo Subaru Impreza con carrocería hatchback y motores bóxer con 154 y 185 caballos combinados con la tracción integral. Además, nueva versión RS con estilo deportivo.

Subaru ha apostado por seguir la misma línea del modelo todavía a la venta, evolucionando su diseño con los nuevos rasgos más modernos del fabricante. Entre las novedades del modelo de la marca japonesa está la plataforma, que ofrece un 10% más de rigidez torsional, junto con un nuevo diseño en el que se destacan las formas de las ópticas delanteras y la parrilla.

Se ofrecerá en tres versiones, Base, Sport y RS, ambas con llantas de aleación de 18 pulgadas pintadas en gris oscuro sumando detalles especiales como los espejos retrovisores pintados en negro, el mismo acabado que los bordes de la superficie acristalada y el spoiler colocado sobre el portón trasero con aletas laterales. El frente cuenta con una nueva parrilla pintada en negro con un acabado más deportivo. De serie, también cuenta con faros y luces antinieblas de LED.

Puertas adentro, el nuevo Impreza está dotado de instrumentos analógico y con una pantalla digital de información entre las esferas clásicas, su consola central está ocupada por una gran pantalla táctil de 11,6 pulgadas. Desde ella se controla el sistema multimedia «SUBARU STARLINK Multimedia Plus», el climatizador automático y las funciones de conectividad que proporcionan «Android Auto» y «Apple CarPlay».

Su dirección asistida electrónica, heredada del nuevo WRX, se ha afinado para transmitir más sensaciones deportivas, a la vez que también se ha refinado el funcionamiento del sistema de tracción total simétrica, que ahora cuenta con vectorización activa del par motor, y también es de serie en las dos versiones.

Hay dos motores, uno es el bóxer 2.0 con inyección directa, 154 caballos y 197 Nm. En el RS está presente el 2.5 bóxer con 185 caballos y 241 Nm. La única caja es la automática CVT, con modo manual de ocho machas prefijadas con levas en los Impreza Sport y RS, que además tienen suspensión deportiva.

La versión RS 2024 tiene el más poderoso 2.5 con 185 caballos y 241 Nm. Ambos se unen con la caja automática Lineartronic CVT (continuamente variable). Las versiones Sport y RS también tienen modo manual con ocho velocidades prefijadas y levas en el volante y suspensión con calibración deportiva. La tracción integral Subaru Symmetrical All-Wheel Drive, según la marca, es una respuesta más rápida, una conducción más ágil.