Agresión a policías de la Caminera: la mujer imputada dice que "todo fue armado"
Regina Utrera, habló tras recuperar la libertad luego de cuatro noches detenida. Dijo que la retuvieron más de dos horas en el control y que no le hicieron la multa, a pesar de que dos veces les entregó la licencia de conducir. Prepara una denuncia.
as ser liberada luego de pasar cuatro noches detenida en la Unidad de Contención del Aprehendido (UCA), Regina Utrera rompió el silencio y acusó a los efectivos de la Caminera de haber armado todo para perjudicarla.
Se trata de la mujer de 52 años que se hizo conocida tras la viralización de un video aportado por policías de la Caminera, en el que se ve como los agrede verbal y físicamente, por lo que fue imputada por la justicia
“Cruzo el peaje (hacia Unquillo) a las 15.30 y me tuvieron hasta las 17.30 retenida sobre la ruta, habiendo aportado la licencia en dos oportunidades”, dijo la mujer en diálogo con el programa “Alta Mañana” por radio Universidad.
Utrera explicó que no le dieron el acta con la infracción en todo ese tiempo. “Tenían otra intención, porque primero se llevan el carnet al coche para verificar y estuvieron 40 minutos, y no lo resolvieron”, señaló.
Luego agregó que “tenían toda la información para labrarme el acta y dejarme ir”, aunque reconoció que les dijo que no se las iba a firmar.
Expresó que, en este caso, le devolvieron a documentación pero sin la multa, tras lo cual “uno de ellos se pone adelante del vehículo para filmarme, el otro hace lo mismo y un tercero pone su pie en la rueda izquierda delantera, por lo que "no podía” arrancar el vehículo para salir del lugar.
“Así estuve casi una hora discutiendo para que me dejaran ir y después mi reacción que se ve, harta, que no la justifico”, aunque ocurrió de esa manera, resaltó. “Esto fue a propósito”, añadió y aseveró que al pedido para que la dejaran ir, no le contestaban nada. “Se burlaban”, afirmó.
Más adelante, cuenta como llegó a la comisaría de Villa Allende a las 18.30, adonde no le dieron “la posibilidad de hacer la denuncia”, la encerraron y no la dejaron ni contar su parte, ni llamar a un abogado.
“Ellos (los policías) se adelantan y hacen la denuncia”, relató y “a partir de ahí empieza toda mi odisea, que fue tremenda y no pude regresar más a mi hogar”, concluyó.
“Estamos en el proceso de denunciarlos en la justicia” por vulneración de derechos, sostuvo Utrera. Aclaró finalmente, que cuando se refirió al pedido de coima, en realidad hablaba de cuando le pidieron plata para reparar el teléfono con el que filmaba un policía y que ella se lo sacó de la mano con un golpe.