La gran novedad del caso que horroriza a la provincia de Córdoba tiene que ver con un posible cambio en la imputación para dos de los tres acusados. Por ahora, tanto el padrastro de la niña asesinada, Matías Simeone, como su amigo Cristian Varela, están acusados de homicidio simple. Sin embargo, según declaró el propio fiscal Gieco, les puede corresponder "homicidio agravado por el vínculo”.

A la madre en tanto le cabe la figura de “comisión por omisión”. El fiscal entiende que “propició con su ausencia que ocurriera esto”. La investigación indica que la progenitora se retiró de la vivienda el viernes por la mañana y dejó a la niña (junto a otros hermanos) al cuidado de Simeone. 

Oscar Gieco, fiscal del caso, en comunicación con Radio Universidad

Respecto a la responsabilidad de la SENAF, Gieco sostuvo que “se está investigando” si hubo una omisión de los deberes de funcionario público o alguna irregularidad similar. Todo esto teniendo en cuenta que en algún momento la Secretaría de la Niñez determinó la separación de los pequeños de su madre, para luego restituirlos a lo que sería un turbulento hogar.

En las últimas horas se han recepcionado declaraciones testimoniales que describieron el entorno: "Los vecinos decían que se escuchaban gritos, peleas, que los chicos no comían, un contexto bastante horrible".

La autopsia demostró que la víctima no tenía restos de monóxido de carbono en la tráquea. Esto implica que no inhaló el humo, y por ende falleció antes de que se produzca el incendio que en algún momento se investigo como causal de la tragedia. Con estos resultados, no queda dudas de que se trató de un homicidio.

NOTA DE LA REDACCIÓN:
Por decisión editorial de este medio, no se incluyen nombres propios, ni imágenes de niños y niñas involucrados en la información. Tampoco, cuando es posible, datos que permiten identificarlos.