Día del Peluquero: la historia de un barbero santafesino que viaja por todo el país
Julio Vera montó una barbería móvil en una camioneta, dejó su ciudad natal y comenzó a viajar por todo el país ejerciendo su profesión. Hoy celebra su día en Capilla del Monte.
Cada 25 de agosto en todo el mundo se conmemora el Día del Peluquero con una peculiar historia de trasfondo. En este día, Julio Vera, peluquero oriundo de Rafaela, cuenta que decidió embarcarse en un sueño que tenía hace mucho tiempo: viajar por el país ejerciendo su profesión.
“Cerré el local, junté todas mis herramientas y mi sillón dentro de mi camioneta y me fui”, relata el peluquero santafesino. El sueño de viajar estuvo siempre, pero fue en enero de este año cuando Julio tomó la decisión de comenzar su recorrido por el país. Hoy visita Capilla del Monte, y espera seguir moviéndose por las sierras cordobesas los próximos meses.
"Hay que dar el paso, lo que uno siente cuando sale es inexplicable"
En unas vacaciones en el sur conoció a otros dos colegas. Fue mientras le cortaba el cabello a uno de ellos que una persona lo interrumpió para preguntarle cuánto valía el corte. “Me pasó con dos o tres más, y en ese momento fue el impulso que me estaba faltando para poder arrancar”, recuerda.
“Creo que el sueño del 95% de las personas es viajar, irse, ser libre y disfrutar de la vida, y creo que también escapar un poco del sistema”, dijo en diálogo con Canal 10.
Acerca de la recepción de las personas en cada ciudad que visita, contó: "La gente se interesa, se acerca con una sonrisa, tirando buena energía. Se sorprende, y sobre todo, le parece innovadora la propuesta".
¿Por qué se conmemora el Día del Peluquero?
Es debido a una decisión que tomó el rey Luis IX. Fue un 25 de agosto que el monarca elevó de estatus social a su peluquero, quitándole la categoría de plebeyo y convirtiéndolo en un “hombre libre”.
En el siglo XIII, en Europa, trabajar en el área de la peluquería no tenía el mismo reconocimiento que los demás profesionales. De hecho, el oficio solo se ejercía para la nobleza que, sobre todo en Francia, utilizaba pelucas y no cabello natural.
Sin embargo, en Argentina, se agregó una razón por la cual celebrar: el peluquero y director de teatro, Domingo Guillén, organizó en 1877 el festejo en el Teatro Coliseo al que fue una gran cantidad de profesionales. Dicho evento incentivó a que se creara la Sociedad de Barberos y Peluqueros, más precisamente desde la ciudad bonaerense de Pergamino.