Sin dudas, uno de los inviernos más crueles de los últimos tiempos, es el que nos está tocando transitar en Córdoba y el país, por estos días.

En Data Universitaria por Canal 10, el infectólogo Hugo Pizzi, dio algunas recomendaciones fundamentales y señaló que los cambios de clima no ayudan, pero hay acciones para evitar enfermarse.

"No se deben olvidar las medidas de prevención que aprendimos y aplicamos durante la pandemia", dijo el infectólogo.

Foto: captura de pantalla de Canal 10
Foto: captura de pantalla de Canal 10

Pizzi dijo que “la cantidad de enfermedades respiratorias que se están observando es un diagnóstico de situación del país y en todas las áreas sanitarias nacionales, en los adultos hay tres patologías que están primando y que son la neumonía, la gripe y el Covid”, y al ser agregó que “el Covid no se ha ido, el año pasado mató 500 y hubo 100.000 casos, mientras que en pediatría los casos son predominantemente de bronquiolitis”, señaló.

“El año pasado se adelantó esa epidemia y este año también se adelantó porque ahora estamos hablando de gran cantidad de casos, si se analiza el otoño donde había mañanas gélidas y después transpirabas al mediodía y te desabrigabas y a la noche tenías de nuevo frío, evidentemente es un terreno absolutamente propenso para lo que está pasando ahora”, comentó Pizzi.

El infectólogo fue consultado respecto de lo que está pasando ahora, co salas de espera atestadas y sanatorios privado con largas esperas, a lo que Pizzi respondió que “es una realidad porque hay pocos médicos y hay mucha demanda”, poniendo el acento en que “se concurre a una sala de espera y no se toman las precauciones adecuadas, lo que provoca contagiarse de otra patología distinta a la que uno iba a consultar, porque nadie usa barbijo, lo que aprendimos en la pandemia que nos mató, lo hemos olvidado”, sentenció,.

“Hoy entre los argentinos, nadie lleva alcohol en gel, los restaurantes y los cafés ya no tienen más el botellón grande para higienizarse y el que lo tiene, está vacío, la gente no tose más en el pliegue del codo como debe ser, suben al ómnibus, donde están todos los virus en la mano y se toma de la baranda, para bajarse y se contamina todo”, detalló Pizzi.

“Al parecer, nos olvidamos rápidamente de todo lo aprendido y esto es un terreno absolutamente favorable para todas las patologías respiratorias. Una sola persona enferma que suba con gripe a un ómnibus, que tosa o estornude, ya lo dicen los bioingenieros: 70 a 60 km por hora que salen las gotas de saliva, pueden impactar hasta 8 metros por lo que contamino primero con mi mano y después toso o estornudo en el colectivo y hasta el chófer se va a contaminar entonces, respecto de lo que le consultamos si hay que ser cuidadosos e ir siempre con un barbijo, a lo que el infectólogo consultado respondió que “al barbijo hay que ponérselo cuando hago un trámite, cuando subo el transporte público y después me bajo y lo saco pero hay que hacerlo, lo tomamos como que eso era sólo para el covid y nada más, pero hoy por hoy es muy importante. Yo recuerdo que en la época del Covid, si bien había muchas otras patologías, como por ejemplo la gripe, bajó justamente por eso, el Covid barrió con todo en su momento, pero nunca olvidemos que estuvimos encerrados, y eso de haber estado encerrados nos sacó del ecosistema y es por eso que no estuvimos en contacto con la tierra, no estuvimos en contacto con los hongos, con los pólenes, con las bacterias, con los virus... estamos frágiles no somos los mismos de la pre pandemia”, reseño Pizzi.

Foto: captura de pantalla de Canal 10
Foto: captura de pantalla de Canal 10

Al ser consultado sobre si hoy con estas enfermedades, se estima qué cantidad de camas están ocupadas en este momento en Córdoba, Pizzi dijo que “en todo el país, la cifra oscila según las áreas sanitarias cercana a un 80%, pero hay un detalle y es recordar que la cama Covid de la época de pandemia era de poca rotatividad, a veces una persona estaba un mes, dos meses y a lo mejor se moría allí, cuando hay internaciones de este tipo de un 80% de camas ocupadas y que son de alta rotatividad, o sea 6 días 7 días. Si no pasa algo feo, lo solucionamos y se reintegra a su actividad, o sea que evidentemente hay mucha gente que a veces ni siquiera sabe lo que tuvo.”

Pizzi explicó que “otro indicador es la cantidad de ausencias que hay en los lugares de trabajo, por ejemplo los colegios, donde hay aulas con chicos directamente que no van, o sea que están vacías las aulas” y agregó que “hemos notado también que de pronto hay una madre que lo conoce a su niño y lo lleva lo mismo al grado, o sea sabe que no está bien y lo lleva y contamina todo el grado. El niño tiene que quedarse en su casa, ser bien hidratado y recuperarse bien; y lo mismo con alguien que a lo mejor tiene deseos de trabajar, no faltar y no va o en condiciones a trabajar, entonces te contamina todo los compañeros porque no se puede estar tosiendo o estornudando constantemente en estas circunstancias.”

Reiterando sus recomendaciones, Hugo Pizzi remarcó “usar barbijo, volvamos a las mismas condiciones que teníamos en tiempos de Covid, para poder estar bien y nunca olviden el pliegue del codo al toser porque así queda todo la virosis en la ropa y nunca contamina a nadie.”

Pizzi también apoyó al Multimedio SRT

Finalmente Hugo Pizzi se refirió afectuosamente al Multimedio SRT que hoy atraviesa una complicada situación de ajuste, al decir que “esta es mi casa o sea yo acá me siento muy cómodo siempre, hemos colaborado siempre, hemos tenido la pantalla, la radio, hemos tenido todo a nuestro alcance y yo siempre digo cuando prendo una pantalla que no es esta por cualquier circunstancia, lo único que puedo saber es que esto ha sido el semillero, toda una casa de formación, de donde salieron los mejores y seguramente aquellos que se están recibiendo también van a poder venir acá. O sea que yo creo que son tormentas, como todas las cosas que nos están sucediendo, que hay que tener un poco de paciencia, son épocas difíciles, pero creo que todo va lograr la tranquilidad y fundamentalmente se va a arreglar de una u otra manera, o sea yo soy optimista”, concluyó el médico infectólogo.