El malestar que sentía un hombre en su vivienda de barrio San Antonio de Padua, en Río Cuarto, lo despertó.

En otro ambiente dormía su hermano, pero cuando lo fue a ver, no tenía signos vitales.

Ese fue el panorama en una vivienda donde, según se cree, un hombre de 54 años murió por inhalar monóxido de carbono.

El desperfecto habría surgido de una pantalla para calefaccionar, que se encontraba conectada a una garrafa de gas en la habitación de la víctima.

Cuando un equipo de emergencias llegó al lugar, se constató el trágico desenlace.