La Iglesia Mormona de Córdoba pagó 4,5 millones para tapar una presunta violación
Ocurrió en Villa Allende. La víctima tenía 14 años. Por el hecho fue detenido quien estaba a cargo de los “Hombres Jóvenes” de la iglesia. Ella, antes de ser obligada a callar, pidió: “Que lo metan preso”.
Un hombre llamado Marcelo Moreno fue detenido en Villa Allende acusado de ser el presunto autor de una violación en perjuicio de una menor de 14 años. La detención se produjo hoy, pero el hecho se remonta a 2017. La razón por la que el episodio se mantuvo oculto es que Moreno tenía un cargo importante dentro del templo de la Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días (conocida como la Iglesia Mormona). A raíz de ello la institución logró, a través de sus máximos referentes provinciales, un acuerdo extrajudicial con los padres de la niña. En el acuerdo la Iglesia negocia en nombre del presunto violador un acuerdo económico a cambio de que nadie hable de lo ocurrido y se esconda la presunta violación.
Según consta en los testimonios judiciales, antes del acuerdo legal, la niña contó lo que vivió a sus amigas y, gracias a los directivos de la escuela donde estudiaba, se radicó una denuncia penal. En su declaración judicial, cuando le preguntaron a la víctima qué esperaba después de contar lo que le ocurrió, dijo: “Ojalá lo metan preso”.
Hasta que el fiscal de Cámara Marcelo Hidalgo ordenó su captura, el presunto violador (su
nombre completo es Marcelo Héctor Darío Moreno Pérez) gozó de libertad absoluta y, además
de asistir a la Iglesia, ejerció como docente en una escuela pública de esta provincia.
Aunque hay dos análisis de ADN por restos genéticos hallados en la ropa de la menor que lo complican, en su declaración judicial Moreno negó el hecho y se abstuvo de declarar.
Tapar todo
El acuerdo firmado entre la Iglesia mormona y la familia de la víctima es confidencial e inaccesible para la prensa. Sin embargo, cba24n.com.ar pudo confirmar que fue confeccionado bajo la coordinación de uno de los máximos representantes de la Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días al momento de la violación: el jefe de Estaca Alejandro Federico Paolantonio. Junto al pastor de la parroquia de Villa Allende donde ocurrieron los hechos, Héctor Hugo Herrador, acompañaron a Moreno Pérez a la hora de negociar con la familia.
Pese a que ya existía una denuncia penal tramitándose en la Justicia, las máximas autoridades provinciales de esa iglesia al momento de los hechos propusieron “un arreglo” a la madre por el que “sin reconocer hecho alguno” la propia Iglesia en nombre de Moreno (el presunto violador) se comprometió a pagarle cuatro millones quinientos mil pesos ($ 4.500.000) a la familia de la adolescente.
El acuerdo que fue homologado por la justicia civil, tiene dos restricciones importantes. La primera es que la niña y su entorno deben desistir “de iniciar cualquier otra acción contra la iglesia y sus filiales en el mundo. La segunda, que se abstuvieran de divulgar el hecho bajo la amenaza de ser demandados por la iglesia si el mismo trascendía.
En este punto cba24n.com.ar desliga de esta noticia a la familia de la niña a quienes ni siquiera intentamos contactar. Accedimos a esta información a través de fuentes off. La iglesia mormona, según pudo saber este medio, también pagó 775 mil pesos a los abogados que representaron a la familia de la niña.
Consultado por la situación, Paolantonio aseguró no tener “ni idea de los términos del acuerdo" generado entre "la parte legal de la iglesia y la familia de la víctima”. Paolantonio era presidente de Estaca de las dos parroquias donde asistían víctima y victimario. “La Iglesia quedó involucrada, pero no tuvo participación”, dijo.
El pastor aseguró desconocer la existencia de un aporte económico de la iglesia: “No tengo ni idea de eso porque la iglesia se maneja con un sistema, nosotros nos manejamos con lo espiritual”.
Entonces se le consultó qué apoyo espiritual había realizado la iglesia a la víctima y Paolantonio contestó: “El hombre involucrado no está yendo más y la chica tampoco. Con esto de la pandemia nos hemos perdido muchos”.
El ataque
Los detalles del hecho resultan difíciles de describir sin caer en la revictimización. Sin embargo, entendiendo que en su declaración judicial y ante su entorno la adolescente fue clara en reclamar que lo ocurrido no quede impune, cba24n considera importante dar información que evidencia la magnitud de lo que se ha pretendido esconder.
El hecho habría ocurrido en la casa de Moreno, ubicada en barrio Villa Allende Golf el 3 de setiembre de 2017. Ese día Marcelo Moreno, que se desempeñaba como Presidente de los Hombres Jóvenes de la iglesia, se ofreció a hacerle “un favor” a la madre de la menor que se encontraba con problemas personales. La madre de la menor abusada había llegado a Villa Allende pocos meses antes con tres hijos a cargo proveniente de otra localidad del interior. Fue la propia Iglesia la que designó a Moreno como su acompañante.
En la investigación penal —independiente del acuerdo económico— la menor contó que su presunto atacante disfrutaba de la confianza de su madre porque era parte de la Iglesia, eral el Presidente de los Hombres Jóvenes, que dentro de la Iglesia son los que van en camino al sacerdocio. Muchas veces Marcelo Moreno había llevado a toda la familia a eventos como “la Santa Cena”, una ceremonia común en la religión.
El día del hecho Moreno tenía que llevar a la chica menor de edad, a la sede de la Iglesia en Arguello y después a Coro en la sede de Villa Allende, que se encuentra en la esquina de Alsina y Rivera Indarte de esa ciudad. Según el relato de la menor, al salir de coro él le dijo que necesitaba pasar por su casa en Villa Allende Golf y cuando llegaron la invitó a bajarse para tomar algo. Dentro de la casa (la esposa y los tres hijos de Moreno no se encontraban) el hombre comenzó a decirle que podía contar con él, que era su amigo y finalmente la abrazó para después alzarla y comenzar el ataque.
La descripción del episodio es precisa, concreta y meticulosa. Inclusive cuenta que el momento del ataque Moreno llevaba puesto y tuvo que sacarse el Garment (o Ropa de Templo) que es una prenda similar al calzoncillo que deben usar las personas mayores y con responsabilidades al ingresar al templo. Según la filosofía mormona esa prenda “simboliza la pureza y es usado por quienes han hecho promesas de fidelidad a los mandamientos de Dios y el evangelio de Jesucristo”. Esa ropa de templo, que según la menor, Moreno no se sacó para violarla representa “el aspecto sagrado de la relación personal del fiel con Dios y su compromiso de vivir de manera digna y honorable”.
En los momentos posteriores al ataque el hombre se retiró al baño donde se puso nuevamente el Garment y habría vuelto llorando y pidiendo disculpas. La menor de edad cuenta que le dijo que él “no quería hacer lo que hizo”, sino que simplemente “quería ser un apoyo”. Después le aseguró que él no iba “a contar a nadie” lo que había pasado sugiriéndole a ella que tampoco lo hiciera.
La Iglesia mormona en Córdoba tiene 54 congregaciones distribuidas en diez “estacas”. Cada una de esas Estacas tiene un Presidente y dos consejeros. Para sostenerse económicamente cada feligrés aporta un diezmo que se corresponde con el 10% de su salario.