Procesan a presunta banda de un empresario, una familia y un contador con franquicias de heladerías
Por presunta asociación ilícita fiscal y lavado de activos, ordenan la prisión preventiva de tres empresarios, la madre de uno de ellos y un contador.
Wadiya y LTA SA son las empresas que trabajaban franquicias de las heladerías Cremolatti y Creambury. Sus empresarios están imputados por presunta asociación ilícita fiscal y lavado de activos.
Tras la feria judicial, el juez federal N° 1 de Córdoba, Ricardo Bustos Fierro, procesó a los empresarios Marcos Javier Baldovino (41 años); a los hermanos Germán Rocca (42) y Joaquín Rocca (44); a Rosa Marta Micoli (71, madre de Germán), y al contador Mauro Ezequiel Falvo (40).
Esta medida se da luego que el fiscal federal N° 1, Enrique Senestrari, acusara a los hermanos Rocca y a Baldovini de liderar una presunta banda.
La banda o asociación ilícita contaba con la ayuda de otras 10 personas que también están imputadas, pero seguirán en libertad.
La banda, desde 2016, operaban para ocultar fiscalmente la real actividad económica de las franquicias y la cantidad de empleados contratados.
Modus operandi
La hipótesis del fiscal apunta a que habrían creado una serie de empresas entre sociedades anónimas (SA) y sociedades anónimas simplificadas (SAS) llamadas Pullman, Amsa, Eletea 1086, Suertudo, Mopa 1086, Wadiya, Andalao y Noplag para concretar operatorias sospechosas.
Con estas SA y SAS habrían abierto distintas franquicias de Cremolatti, de Creambury y de Panicafé en la ciudad de Córdoba, a pesar de no contar con capacidad económica, patrimonial ni financiera para desarrollar esas actividades.
Otra de las maniobras habría consistido en no pagar, o en hacerlo sólo de forma parcial, las deudas impositivas o previsionales –dispuestas por la Afip– de las empresas, con lo que se dejaban inactivas las firmas involucradas para crear nuevas empresas y continuar con su actividad comercial.