Cuando la primavera ya realizó la mitad de su recorrido y el verano intenta golpear la puerta, se vienen tiempos en los que la lluvia toma protagonismo.

En tierras cordobesas, un período de fuerte inestabilidad embate contra el fin de semana. Las primeras advertencias llegaron en la madrugada del viernes, pero se sostendrán y tomarán mayor fuerza.

De hecho, toda la provincia está incluida en “alerta por tormentas” de acuerdo al sistema de detección temprana del Servicio Meteorológico Nacional.

El impacto fuerte será entre esta noche y las primeras horas del sábado. Varios departamentos están incluidos en un informe por “alerta naranja” ante la posibilidad de fenómenos diversos.

“El área de cobertura será afectada por lluvias y tormentas de variada intensidad, algunas localmente fuertes o severas. Las mismas estarán acompañadas de intensas ráfagas, caída de granizo, fuerte actividad eléctrica y abundante caída de agua en cortos períodos. Se esperan valores de precipitación acumulada entre 40 y 60 mm, pudiendo ser superados de forma localizada”, reza el texto.

Le apunta puntualmente a Juárez Celman, las zonas serranas de Río Cuarto, Calamuchita, Cruz del Eje, Minas, Pocho, San Alberto y San Javier, además de la zona baja de Río Cuarto.

Para el resto del territorio, habría lluvias de al menos 20 milímetros y son parte de un alerta “amarillo”.

En la Capital, se prevé para este viernes que de todas formas la temperatura llegue a los 29 grados. El contexto lo marcarán las precipitaciones, fenómenos aislados y vientos del noreste, que podrían contar con ráfagas de hasta 50 kilómetros por hora.

El sábado se mueve entre chaparrones, tormentas y el giro del viento hacia el sur, con descenso del mercurio.

Persiste, en tal sentido, un alerta “amarillo”, a excepción del noroeste.

Para el domingo las condiciones no variarían mucho, con el gris en el cielo y una máxima de 23º.