Semana de las Vacunas en Córdoba: más de 75.000 dosis colocadas
La iniciativa es patrocinada por la Organización Panamericana de la Salud (OPS) junto con los países de la región. La vacunación es una de las principales medidas para evitar diversas enfermedades.
Desde el 20 al 27 de abril se llevó adelante en la provincia de Córdoba la 22° Semana de Vacunación en las Américas (SVA) organizada por la Organización Panamericana de la Salud (OPS) junto con los países y territorios de la Región de las Américas y sus asociados.
La iniciativa, ya una política en muchas administraciones de salud, busca promover la equidad y el acceso a la inmunización en todos los países de Latinoamérica.
Durante estos días, distintas localidades del interior provincial y de la ciudad capital llevaron a cabo diferentes propuestas y actividades con el objetivo de que las personas completen sus esquemas de vacunación, se coloquen las dosis antigripales o el correspondiente refuerzo de la vacuna contra Covid-19.
En total, se colocaron 75.427 dosis, dentro de las cuales más de 34 mil corresponden a vacunación antigripal para los diferentes grupos; más de 5 mil contra el neumococo, que contribuye a prevenir neumonías causadas por esta bacteria; y resto fueron refuerzos covid-19 y distintas vacunas de calendario.
La importancia de la vacunación
La colocación de vacunas en las distintas etapas de la vida se considera una de las principales medidas para evitar un conjunto de enfermedades prevenibles que pueden ser graves para la salud de las personas.
En nuestra provincia –como en el resto de la Argentina-, las vacunas del Calendario Nacional son obligatorias y gratuitas; se aplican en los más de 800 vacunatorios, centros de salud y hospitales públicos distribuidos en todo el territorio. El calendario incluye vacunas para todas las etapas de la vida, situaciones especiales o para grupos específicos.
La cartera sanitaria insiste en la recomendación de completar los esquemas sugeridos y que sea responsabilidad y obligación de los ciudadanos aplicar las dosis correspondientes a cada etapa de la vida, para evitar enfermarse y contagiar a las familias y otras personas.