Señalizaron la "Casa de la Memoria Imprenta del Pueblo Roberto Matthews"
En la vivienda, ubicada en Fructuoso Rivera 1035, funcionó la imprenta del Partido Revolucionario de los Trabajadores (PRT) entre 1974 y 1976. Luego del golpe cívico-militar, el inmueble fue utilizado por los militares como centro clandestino de detención y torturas. El acto e inauguración se realizó este sábado con presencia de vecinos y organizaciones.
Después de años de luchar para que la vivienda donde funcionaba la imprenta clandestina del Partido Revolucionario de los Trabajadores (PRT) entre 1974 y 1976 sea restituida a los militantes y organismos de Derechos Humanos, en el año 2019 se logró recuperar el espacio para la memoria.
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Tras obras de mantenimiento, fue bautizada como "Casa de la Memoria Imprenta del Pueblo Roberto Matthews": un inmueble ubicado en el barrio Observatorio, que significa un testimonio vivo de la resistencia a la dictadura y de acompañamiento de las luchas del presente.
La Dirección Nacional de Sitios y Espacios de Memoria de la Secretaría de Derechos Humanos de la Nación señalizó la casa y realizó un acto junto a la comunidad este sábado. El sitio de memoria está ubicado en Fructuoso Rivera 1035, ciudad de Córdoba.
En el acto estuvieron presentes el secretario de Derechos Humanos de la Nación, Horacio Pietragalla Corti y la directora Nacional de Sitios y Espacios de Memoria, Lorena Battistiol. Además, se sumaron organizaciones de Derechos Humanos de la ciudad de Córdoba y cientos de vecinos.
En un diálogo que mantuvo con un móvil de Radio Universidad, el abogado y militante por los derechos humanos, Carlos 'Vasco' Orzaocoa dijo que la imprenta funcionaba "a 10 metros de profundidad, en una bóveda gigante, donde se imprimieron periódicos, folletos, libros de historia y de ciencias sociales en una época donde esa literatura estaba prohibida por la dictadura genocida".
La imprenta dejó de funcionar en julio de 1976 cuando irrumpió el Ejército, desmanteló la imprenta, tomó la casa e instaló uno de los tantos centros clandestinos de detención que existían a lo largo y ancho del país.
La imprenta se empezó a construir en el subsuelo de la vivienda de barrio Observatorio en 1973 y se terminó un año después. Alli se imprimieron miles de ejemplares de “Estrella Roja” y “El Combatiente”, que luego se distribuían por distintos puntos del país.