Un fallo sin precedentes: cuánto influye la condena a Alan Amoedo de cara al futuro
A simple vista, 9 años parecen poco por un incidente de estas características. Sin embargo, al hacer una lectura entre líneas y más exhaustiva el fallo traza un antes y un después en la jurisprudencia argentina por incidentes viales.
Este viernes se conoció el fallo del juicio a Alan Amoedo, quien fue condenado a 9 años de prisión bajo la carátula de homicidio simple con dolo eventual.
A simple vista 9 años parecerían ser insuficientes para tal hecho, teniendo en cuenta que la querella pidió 20. Sin embargo, hay que prestar atención a toda la condena y no solo el número de años de prisión para verdaderamente entender cómo fue este fallo.
Es la primera vez en la Justicia argentina que un siniestro vial es contemplado bajo la carátula de homicidio simple con dolo eventual.
Traducido: es la primera vez en Argentina que un siniestro vial es visto como un asesinato y no como un accidente. Esa es la lectura que hay que hacer.
Sobre ese tema habló Miguel Robles en Otra vuelta de tuerca de Radio Universidad. Robles es un exfuncionario nacional de Delitos Complejos y es antropólogo especializado en la materia.
En primer lugar, Robles destacó el rol que puede cumplir la sociedad al poder organizarse como poder judicial e imponer sanciones penales, como ocurrió en este caso.
En ese sentido, destacó que la mayor importancia de una pena no recae sobre los años de condena sino que radica en la enseñanza o prevención que genera:
"A partir del momento que se aplica una sanción penal todos los integrantes de una sociedad estamos notificados de que un hecho de estas características va a ser sancionado por el Poder Judicial".
Al hablar de este fallo en particular, Robles afirmó que "es una condena histórica para Córdoba, un antes y un después en materia de accidentes de tránsito".
Es por eso que el especialista criticó a la Corte Suprema de Justicia al afirmar que "viene atrasando unas cuantas décadas" en este tipo de casos.
"Veremos si el clamor popular alcanza o si la Corte Suprema sigue fallando con normas que están más vinculadas a épocas que los vehículos eran activados con caballos", expresó.
Volviendo a este fallo, Robles sostuvo que el nombre y apellido de Alan Amoedo prácticamente se ha convertido en sinónimo de asesinato:
"Vamos a la dimensión humana de lo que está detrás, hay muchas cosas que van a empezar a acontecer ahora luego de este fallo que es histórico".
Un antes y un después en los siniestros viales
Por otro lado, habló sobre la redefinición de la siniestralidad vial que implica este fallo, sobre todo en cuanto al debate que se está dando en la Corte vinculado a la legitimidad:
"Luego de un fallo de estas características en la provincia de Córdoba, creo que va a ser muy difícil para la Corte revertir esta situación"
En ese sentido, se refirió a cómo un pedido y lucha social puede influir en el accionar de la Justicia.
Es por eso que comparó y mencionó al movimiento Ni Una Menos, que afirmó que "no le preguntó al Poder Judicial cuál era el camino que tenía que seguir, sino que le indicó y lo obligó a través de la lucha social ese camino".
La importancia del fallo a Amoedo
Por tal motivo, Robles recordó que el caso Amoedo iba a quedar como un homicidio culposo ya que "no alcanzaba con que los testigos manifestaran que manejaba borracho y a altísima velocidad".
Sin embargo, reflexionó sobre la importancia de este fallo y del cambio de carátula que hubo para lograr la condena final:
"Aquí se logró demostrar que un auto puede ser usado como un arma y que tiene una letalidad muy superior a la de un arma"
Es importante destacar que Robles describió días atrás un informe de la Universidad Siglo 21 que afirma que el auto de Amoedo "impactó con una fuerza mayor a la de un arma".
Ese informe fue publicado en Cba24n y fue puesto como respaldo en los alegatos de la querella en el juicio a Alan Amoedo, lo que significó un factor importante para el fallo final.
"Además, hay una cuestión cultural del Poder Judicial que estaba anquilosada vinculada con esta cuestión de que un siniestro vial era siempre un accidente, eso ha cambiado", destacó.
Conclusiones
Por último, Robles afirmó que jamás festejó un fallo ni se dispuso a pedir años de condena pero que "9 años por un siniestro vial yo creo que es una pena absolutamente justa y suficiente", sentenció.