Boca le ganó a Palmeiras en Brasil y está en la final de la Copa
Igualaron 1 a 1 en el tiempo reglamentario. Chiquito Romero, otra vez, fue la gran figura. Lo espera Fluminense el sábado 4 de noviembre en el Estadio Maracaná de Río de Janeiro.
Boca Juniors clasificó a la final de la Copa Libertadores de América tras derrotar en los penales a Palmeiras en Brasil. En el tiempo regular habían igualado 1 a 1 y desde los 12 pasos fue nuevamente Sergio Romero la gran figura del equipo argentino.
Más allá de algún momento en el inicio, el gran mérito del Xeneize fue salir a ser protagonista y dar la constante sensación de encontrarse a un pase entre líneas de convertir, con una última línea de tres defensores local que hacía agua. Gabriel Menino fue el primero en amenazar con un tiro que tapó Sergio Romero, pero después los argentinos fueron creciendo en el desarrollo.
A los 23 minutos, Miguel Merentiel logró picar por izquierda con la defensa mal parada, fue una aplanadora ante la marca de Gustavo Gómez y, cerca de la última línea y ante la salida de Weverton, metió el centro pasado que empujó Edinson Cavani por la derecha.
Cuando cerca del descanso Valentín Barco obligó al esfuerzo a Weverton, ya estaba claro que Boca era el gran merecedor del premio de la primera mitad. Habría que ver qué le deparaba el último cuarto de la serie.
En el complemento el trámite se modificó de manera exponencial. Obligado por la localía y por el resultado, el Verdao sumó gente en ofensiva y buscó de manera incesante llegar a los penales. Para colmo, el club de La Ribera le facilitó el deseo, ya que Marcos Rojo -en un acto tan impulsivo como irresponsable- vio el cartón colorado por dos faltas groseras.
En inferioridad de condiciones, el Xeneize se resignó y únicamente apostó a que pasara el tiempo, pero un remate de larga distancia de Joaquín Piquerez (a los 28 minutos) sorprendió a Sergio Romero, quien tuvo una respuesta dubitativa y provocó el 1-1.
Llegó el turno de los penales
Definir una instancia por penales, para el Xeneize, parece un hábito. Amparado en la confianza que siempre le brinda su arquero, que contuvo dos ejecuciones, el conjunto argentino se impuso por 4-2 y pasó a la final. El 4 de noviembre, en el mítico Estadio Maracaná, irá por la gloria ante el Flu,
Fuente: Télam