La surfista hawaiana Keala Kennelly ganó un premio que no tenía pensando, pero al menos puede celebrarlo, y eso significa que sobrevivió a la caída más brutal de surf del año.

Kenelly tiene 41 años y es especialista en olas gigantes. Esta vez no fue distinguida por domar uno de estos monstruos de agua, sino por la "caída del año". Se trata del premio Big Waves Wipeout Of The Year

“La tabla me dio en las costillas y en la cara y di tres volteretas", recordó la hawaiana, que en años anteriores recibió muchos premios por ser una gran surfeadora de olas de gran tamaño.