Libertad festejó en el Héctor Echart, en su primera participación de esta novedosa Liga Nacional, al derrotar a Oberá TC por 78 a 72, en un juego sumamente equilibrado donde fue clave el parcial del último capítulo donde se impuso 27 a 19.

Marcos Saglietti mostró todo su oficio para erigirse en la figura, aportando 21 puntos, 13 rebotes y 6 asistencias.

Como se preveía, el primer período fue muy impreciso y de bajo goleo donde los protagonistas pagaron el escaso rodaje que tienen. Las dupla Saglietti - Hure fueron fundamentales para alimentar el goleo aurinegro aportando 9 de las 14 unidades. Enfrente, los Celestes dependieron excesivamente de Schoppler que produjo una decena de puntos (2 triples) en los 10' iniciales.

En el cierre del cuarto, Manu Alonso acertó un escopetazo de larga distancia para que los Tigres se fueran al descanso corto ganando por la mínima (14-13).

En el segundo capítulo mejoró notablemente la producción de ambos rivales (22-21) que mantuvieron un goleo muy distribuido. En Libertad, los hermanos Alonso fueron claves: Augusto para revertir una desventaja promediando el período, Manuel para repetir la gesta del último balón que volvió a ponerlos arriba antes de retirarse a los vestuarios (36-34).

El tercer cuarto no desentonó de los anteriores. Hiper equilibrado, goleo escaso y alternándose en el liderazgo. Libertad solo pudo producir 15 unidades, donde Saglietti y Martínez redondearon 8 entre los dos. Enfrente, Schoppler y Kent mantuvieron la producción celeste, entregando una cifra similar. El doble agónico de Gómez Quintero le dio el triunfo parcial a Oberá TC que se fue ganancioso al banco por 51 a 53.

En el tramo final, los aurinegros contaron con más opciones en las ofensivas y fue determinante para alzarse con la victoria. Saglietti, el gran capitán lideró los ataques (10 en este cuarto) pero tuvo la compañía del experimentado Alloatti (5), Corzo (7 en estos 10' con un bombazo vital) y el desparpajo de Manuel Alonso que se hizo cargo de la base cuando su hermano se despidió por 5 faltas y entregó media decena de unidades cuando nada estaba resuelto.

Sin embargo, el parcial 27-19 no refleja la paridad extrema que hubo en el rectángulo de juego, a tal punto, que restando 1'30'' estaban empatados en 72. Fueron esos 90 segundos definitorios, donde los Tigres acertaron ante un rival que ya no pudo seguir escalando en el tanteador.

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