Manchester United sorprendió a Manchester City, le dio vuelta el resultado en dos minutos para ganarle 2-1 por la fecha 16 de la Premier League y así profundizó la crisis del equipo de Pep Guardiola.

Amad Diallo fue el héroe de la remontada del United: en la agonía del partido generó un penal que derivó en la igualdad y luego convirtió el gol de la victoria. Josko Gvardiol había puesto en ventaja al City en la primera parte.

Recién a los 21 minutos llegó el primer intento al arco del partido: Jérémy Doku generó peligro por la izquierda, logró tirar el centro y tras un despeje la pelota le cayó a Phil Foden, quien remató y su disparo se fue muy cerca de la valla defendida por André Onana.

La etapa inicial tenía exceso de precauciones y mucha carencia de movilidad y sorpresas por parte de ambos equipos.

La igualdad, más allá de una leve superioridad del City, era lo más justo. Hasta que a los 36 minutos, Josko Gvardiol rompió la paridad con un especialidad de la casa: un gol de cabeza. El defensor croata aprovechó un centro de Kevin De Bruyne que se desvió en Amad Diallo, conectó de cabeza e infló la red de Onana, quien no tuvo reacción posible.

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Fue el cuarto gol de Gvardiol en la Premier League 2024/2025, lo que lo ubica como el segundo goleador del equipo de Guardiola en la liga detrás de Erling Haaland (13).

Manchester City estuvo cerca de irse al entretiempo con una exagerada ventaja de goles: a los 49 minutos Foden, el más creativo de la cancha, inventó espacios con un par de gambetas y su remate, que se desvió en Harry Maguire, se fue muy cerca del palo tras la salvadora intervención de Onana.

En la segunda etapa, el local estuvo incómodo porque no pudo adueñarse del juego. La ausencia de Rodri es claramente notoria: los de Guardiola ya no dominan los partidos y aunque tengan más posesión que su rival, no abruman.

Y el visitante se acercó al empate dos veces: a los 62 minutos, con un cabezazo de Diallo que Ederson mandó al córner con una gran atajada y a los 74, con una habilitación de Rasmus Hojlund para Bruno Fernandes, quien definió apenas ancho en el cara a cara con Ederson.

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La tercera fue la vencida porque a los 86 minutos Matheus Nunes cometió dos errores enormes: primero le regaló la pelota a Diallo en la salida y luego, ante la desesperación por subsanar su error le cometió penal. Fernandes lo ejecutó a la perfección un par de minutos después para sellar la igualdad.

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Y cuando el City aún estaba aturdido por el golpe del empate, apenas dos minutos más tarde, Lisandro Martínez le dio un pase maravilloso a Diallo, quien con absoluta frialdad pasó la pelota por arriba del arquero y definió con categoría para revertir el marcador.

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Con poco vuelo y muchas dudas, los Citizens profundizaron su crisis: solo ganaron uno de sus últimos once partidos, algo que no les ocurría desde hace más de 20 años, cuando ganaron uno de dieciocho entre noviembre de 2003 y febrero de 2004.

Por su parte, Manchester United evitó perder tres partidos seguidos por la Premier por primera vez desde diciembre de 2015 cuando el entrenador era Louis van Gaal.

Rúben Amorim rompió una racha negativa para los entrenadores del United: desde Alex Ferguson en 1987 que un DT de los Red Devils no ganaba en su primer derbi.