Los residentes en el área del Hard Rock Stadium de Miami, donde el próximo 8 de mayo se debe celebrar el Gran Premio de Miami de Fórmula 1, han pedido la cancelación del evento debido a que piensan que causará un ruido "intolerable" para los vecinos.

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La carrera llega a la ciudad estadounidense después de años de continuos intentos para la celebración de una prueba en este lugar. Primero se habló de que el circuito se situase en el centro de Miami, pero finalmente se ha acordado que la F1 compita alrededor del estado de los Miami Dolphins.

Como ha sucedido con la llegada de la F1 a otros circuitos urbanos, los vecinos de la zona han protestado contra el evento, que alterará sus vidas durante varios días. Para ellos, la celebración de la competición y del resto de actos que la rodean causará un ruido "intolerable", de acuerdo con la información que recoge EFE.

El abogado de los residentes de la zona ha alegado que la F1 y su ruido "causarán graves trastornos y daños físicos" a los vecinos. Éstos citaron un estudio que estima que el evento generará hasta 97 decibelios de ruido en los hogares dentro de un radio de 4 kilómetros alrededor del estadio Hard Rock.

Según el diario "El Nuevo Herald", ahora será un juez quien tendrá que decidir si permite o no la celebración de la Fórmula 1, y tendrá que hacerlo el próximo lunes. En realidad, no se cree que la demanda de los vecinos, que protestaron el miércoles frente al Ayuntamiento de Miami Gardens,  salga adelante. 

El problema debe acabar cuando Miami declare la F1 como "evento especial", lo que daría una mayor flexibilidad de cara a cumplir con la ordenanza local. 

Miami será el undécimo lugar que visite la Fórmula 1 en EEUU desde el inicio del campeonato en 1950, tras Indianápolis, Sebring, Riverside, Watkins Glen, Long Beach, Las Vegas, Detroit, Phoenix y el Circuitos de las Américas de Austin.