En Córdoba, la UOM y la Unión Industrial rechazan la reducción de la jornada laboral
Desde ambas entidades y por diferentes razones, plantearon inconvenientes en relación a una futura iniciativa. El bancario Sergio Palazzo adelantó que si es electo diputado, llevará el proyecto al Congreso.
En el comienzo de la campaña electoral con vistas a las PASO y a las legislativas, el titular de la Asociación Bancaria y candidato a diputado nacional por el Frente de Todos, Sergio Palazzo adelantó que si es electo presentará el proyecto de reducción de la jornada laboral en Argentina y encendió la polémica.
En Córdoba, tanto la Unión de Obreros Metalúrgicos (UOM) como la Unión Industrial de la provincia (UIC), plantearon sus reparos a la implementación de una medida de esa naturaleza, aunque por diferentes motivos. Mientras desde la entidad gremial aseguran que son proyectos que intentan "romper la legislación laboral argentina", desde la entidad fabril afirman que es "iinviable" sobre todo "cuando se habla de reducir la mano de obra para mantener el costo laboral".
Rubén Urbano, titular de la UOM en la provincia, en diálogo con el programa "Pensavalle Informa" por radio Universidad, dijo que "en el caso de los metalúrgicos quieren cambiar el convenio, conforme a las necesidades de las automotrices". En ese sentido, afirmó que en caso de que se debata la iniciativa "vamos a defender con uñas y dientes la legislación laboral actual, que nos mantiene dignamente con respecto a formas de trabajo que tienen en otros lugares del mundo".
En esa dirección, el dirigente gremial planteó que "si el trabajador va a trabajar menos y va a cobrar menos, en un país con trabajadores pobres que no llegan a fin de mes, mucho menos vamos a llegar trabajando menos cantidad de horas".
A su turno, Marcelo Uribarren, titular de la Unión Industrial de Córdoba pidió "realizar otras modificaciones de fondo, antes de discutir estas cuestiones". En el mismo espacio radial sostuvo que "lo que hay que hacer es generar condiciones para la inversión, para que las empresas nuevas puedan incorporar nueva mano de obra" en alusión a la flexibilización laboral, rechazada por las entidades gremiales.
El dirigente fabril remarcó en esa línea que "cuando se habla de reducir la mano de obra para mantener el costo laboral, nos parece que sería inviable" y agregó que "hay un 50 por ciento de mano de obra en negro en Argentina, fuera del sistema previsional, fuera de las paritarias, y lo antes posible deberían ser incorporados al sistema formal".