Se sabía que el inicio de la gestión de Alberto Fernández tendría como gran condicionante una negociación ardua con los bonistas, para intentar que no detone con rapidez la deuda externa argentina.

De allí que iniciado enero, el ministro de Economía, Martín Guzmán, puso en marcha la Unidad de Gestión de la Sostenibilidad de la deuda pública externa, con Lisandro Cleri al frente. Pero su gestión en el equipo, de carácter ad hoc, finalizó rápidamente.

Este jueves, se oficializó su salida, con la designación de otra de las integrantes del conjunto económico, Rosana Bebén, en ese lugar.

Cleri, funcionario de muy bajo perfil, trabajó junto a su sucesora además del secretario de Finanzas, Diego Bastourre, y Ramiro Tossi. En este tiempo, se encargó de recolectar detalles de los bonistas que aparecieron desde 2016.

Ahora, con la oferta realizada y a la espera de respuestas que renueven la negociación, Bebén deja su lugar en la Dirección Nacional de Estrategia del Financiamiento de la Secretaría de Finanzas.

Mientras que Cleri tendrá su espacio a cargo del estratégico Fondo de Garantía de Sustentabilidad (FGS), donde ya se desempeñó en el final de la última gestión de Cristina Fernández.

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