En octubre de 1993 Michael Jackson se presentaba en Buenos Aires
Hoy recordamos aquel recital sorprendente que deslumbró a miles de fans a lo largo de tres presentaciones. Miralo aquí completo
Tiempo Argentino decía en parte de su crónica de este show:
"A Michael Jackson su segunda gira mundial lo trajo al país. El artista estadounidense quería ir a donde nunca había tocado y Sudamérica estaba entre sus pendientes. Recorrió 69 países con este tour para presentar "Dangeorus", su octavo álbum de estudio como artista en solitario, ante un total de casi cuatro millones de personas en todo el mundo. En Argentina, ese año, en 1993 también tocaron Madonna y Paul McCartney, pero Michael era el hombre del momento, el rey, y las entradas se agotaron en pocas horas. Fueron tres shows en River que formaron parte de la gira mundial Dangerous World Tour.
El disco Dangerous era en ese momento un infaltable. Había salido en 1991 y había tenido mucha publicidad porque era lo nuevo de Michael, por supuesto, porque tenía el tema de la película Liberen a Willy, y porque como si fuera poco tenía colaboraciones como la de Slash, guitarrista de de Guns & Roses, otro mega boom del momento. En la carrera de Michael Jackson es un trabajo que marcó un antes y un después, porque si bien la fama ya la tenía, el record de ventas que representó en esa época en la que el CD dominaba el terreno es un capítulo en la vida del cantante en el que revalidaba el titulo de figura absoluta del universo musical.
Todo era una locura por esos días. Imitadores y gritones se agolpaban en la puerta del Hotel Hyatt, actual Four season, en la zona de Retiro. Jackson llegó al país dos días antes del primer show, cuando el escándalo por el supuesto abuso de menores estaba empezando a convertirse en un tema central a su alrededor.
Excéntrico y fascinante por partes iguales, Michael era noticia donde fuera y por miles de motivos. Su obsesión con la niñez, con las miles de leyendas y trascendidos que eso conllevaba, sus shows que dejaba atónitos a propios y extraños, y el fanatismo que despertaba era lo que dominaba la agenda en aquel momento.
El primer show fue el 8 de octubre de 1993, luego hubo otro el 10 y otro el 12. Un viernes, un domingo y un martes. El primero de ellos comenzó con más de dos horas de retraso. Dijeron que se había quedado jugando al flipper en el hotel.
Fue un delirio del público cuando se sucedieron los temas. Todos los del trabajo que daba título al espectáculo y todos los clásicos anteriores. Una anécdota especial la constituyó que no pudo utilizar el dispositivo que lo levantaba por el aire ya que no arribó al país el combustible apropiado para ese efecto.
Por suerte, sobre todo para los fanáticos, años más tarde se inventaba YouTube, para poder volver a vivir esa fiesta.
Y hoy repetimos ese show a casi 27 años de sucedido y a 9 años de la muerte del artista y luego que mucha tinta corriera a lo largo de su historia, tan deslumbrante, tan penosa...