El Coro Polifónico de Córdoba y la Orquesta Sinfónica de Córdoba interpretan la Misa de Réquiem, de Wolfgang Amadeus Mozart, los días viernes 24 y sábado 25, a las 20.

Es importante destacar las voces solistas de Lucía González (soprano), Verónica del Villar (mezzosoprano), Luciano Santamaría (tenor) y Julián Montico (bajo). La dirección general es del maestro Jongwhi Vakh.

Localidades en boletería de avenida Vélez Sarsfield 365 -teléfono 414 3412-, de martes a sábados de 9 a 20 y domingos de función de 17 a 20, también por Autoentrada: 1500 pesos, platea, 800, cazuela, 700, tertulia, y 500 pesos, paraíso.

El Director de la Orquesta Sinfónica de Córdoba Jongwhi Vakh

El Teatro nos ofrece esta reseña sobre la historia de la obra magna...

Meses antes de morir, Wolfgang Amadeus Mozart comienza a componer un Réquiem por encargo. 

El comitente es un conde de nombre Walsegg-Stuppach, quien pretende de este modo honrar la memoria de su esposa muerta.

La pieza queda a medio terminar por el fallecimiento del genio del Clasicismo. Hay dos partes terminadas, el resto son borradores. Mozart nace el 27 de enero de 1756 y muere el 5 de diciembre de 1791, a la edad de 35 años.

Sobre el contexto en el que se compone esta monumental pieza litúrgica, Miguel Angel Marín, doctor en Musicología, cuenta: "En torno al moribundo se agolpaban músicos que ensayaban y trasladaban a la partitura las indicaciones que Mozart iba dictando".

Imágenes del ensayo


Al producirse el deceso, "se puso en marcha un complejo engranaje en el que intervinieron la viuda del compositor y algunos de sus colaboradores (particularmente Franz Xaver Süssmayr) con el objetivo de finalizar la obra. Mozart había muerto. Su leyenda acababa de nacer".

A lo largo de los años, el Réquiem de Mozart es objeto de numerosos arreglos y transcripciones, incluso hay una transcripción para cuarteto de cuerdas del también compositor austriaco Peter Lichtenthal.

"El Réquiem es una obra grandiosa, poderosa en el temor de sus visiones del Juicio Final, sublime en la suavidad de su evocación de la salvación y el descanso eterno", concluye el comentarista especializado, Orrin Howard, director de Publicaciones y Archivos de la Filarmónica de Los Ángeles.

La Orquesta se prepara para la gran interpretación

/Fuente y fotos: prensa del Teatro del Libertador/