Metallica conmovió a sus fans en el Campo Argentino de Polo
Ante más de 60 mil personas la banda de Los Ángeles dedicó gran parte de su recital al conocido "Album Negro" y el resto repasó otros clásicos de su repertorio
El sábado a la noche en el Campo Argentino de Polo se vivió uno de los recitales más esperados con la presentación de Metallica, tras cinco años desde su última visita al país. El grupo celebra los treinta años de su afamado Álbum Negro". En 2020 el show se suspendió por la pandemia y su anterior presentación había sido en Lollapallooza de 2017.
El conjunto fundado por James Hetfield -cantante, segunda guitarra y principal letrista de la banda-, y el baterista Lars Ulrich ofreció gran parte de los temas del célebre y más exitoso disco homónimo, conocido popularmente como "Álbum negro", el resto del show abarcó fragmentos de lo mejor de la etapa más trash metal de la banda, con la salvedad de unas pocas canciones de su etapa posterior.
A la noche fría una llamaradas inesperadas surgieron desde distintos puntos del predio cuando sonó el tema "Fuel", además, distintas piezas visuales aportaron imágenes con diferentes climas entre canción y canción.
La lista de temas reforzó el espíritu trash metal de los ochenta que sobrevoló la mayoría de veces el espectáculo y se mezcló con el infaltable "Álbum negro": "Holier Than Thou", "Seek and Destroy" de "Kill 'Em All" y el inolvidable "One", del disco "...And Justice for All" de 1988, que derivó en un show de lasers que se sumó a las recurrentes llamaradas para disfrute visual del público.
Le siguieron "Sad But True", el emotivo "The Unforgiven", "Creeping Death", el reciente "Moth Into Flame" y "No Leaf Clover", canción grabada en 1999 entre Metallica y la Orquesta Sinfónica de San Francisco.
Para el final, sonó "Master of Puppets", del aclamado disco del mismo nombre de 1986, y la banda se retiró unos minutos para dar paso a los bises ante la arenga de sus seguidores.
El conjunto reapareció con "Spit Out the Bone", del disco "Hardwired... to Self-Destruct" de 2016, y se retiró a lo grande con una de sus mejores 'power ballads', "Nothing Else Matters", y el tema de apertura del disco que más canciones aportó a la velada, "Enter Sandman", lo que puso un broche de oro a la gran noche del metal y permitió a los fanáticos seguir saltando con más actividad que nunca.
El show de Metallica también se pudo seguir a través de una transmisión por streaming en la plataforma Flow, a la que se conectaron 250 mil personas.
Marina Fages, cantante, multinstrumentista y artista visual y posteriormente la banda estadounidense Greta Van Fleet, conformada por los hermanos Kiszka, fueron los teloneros del show de Metallica .
/Fuente: Télam/