“En un país empobrecido, comprar fusiles es de sectores profesionales o de paramilitares"

Continúa la tensión en Brasil por el llamamiento a la población a comprar armas. Hace unos días el presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, convocó a la población a comprar fusiles "para no ser esclavizados" y prometió que serán pacíficas las manifestaciones en las que participará el 7 de septiembre, Día de la Independencia, para repudiar al Supremo Tribunal Federal que lo investiga por atentar contra el sistema electoral y diseminar noticias falsas a la población.

En ese sentido y en diálogo con La Perra Vida de Radio Universidad, el corresponsal argentino Darío Pignotti, dijo que “hay que recordar que el presidente brasileño cuando llegó al poder liberó la venta de algunas armas de guerra pero también la portación en la vía pública. Cualquiera en la calle puede sacar un arma larga y está cubierto por la nueva legislación. ”, explicó el analista.

Al mismo tiempo Pignotti advirtió que muchas instituciones manifestaron, no el riesgo de un Golpe, pero sí que sea un ensayo de Golpe de Estado. “Lo que se espera es que el próximo 7 de septiembre existan miles de personas armadas y que las policías provinciales que responden a Bolsonaro no van a tomar represalias. de eso se trata el ensayo”, explicó el periodista.

Todo surge en medio de las tensiones con el Supremo Tribunal Federal que investiga al presidente brasileño por atentar contra el sistema electoral y las críticas por la inflación creciente en el país y el aumento de la canasta básica de alimentos.

Los gobernadores pidieron a las policías respetar la legalidad y no involucrarse en política, algo que está prohibido por ley. “Se está instando a que se tome por sorpresa o el Palacio o el Congreso. Por lo menos es lo que surge en las redes sociales y con tensiones desde la semana pasada cuando fue separado de su cargo un coronel de la Policía de San Pablo cuando convocó a participar armados a las manifestaciones. Lo que va a ocurrir lo sabremos posterior a la convocatoria ”, concluyó Pignotti.