Nicolás Otamendi y su familia fueron víctimas de un violento robo el fin de semana en su casa de Portugal.

El defensor de 33 años, que juega en el Benfica, fue abordado por cuatro delincuentes en el ingreso de su vivienda. Después de maniatarlo, le pusieron un cinturón sobre su cuello y lo hicieron pasar a la casa, según informó el medio portugués Correio da Manhã. 

De acuerdo al medio local, dentro de la vivienda se encontraban la mujer y el hijo del jugador del seleccionado argentino.

Después de revisar la casa los ladrones se habrían llevado joyas y relojes que estaban guardados en el inmueble.

El club Benfica confirmó la noticia a través de un comunicado en el que pidió "que la privacidad del jugador y su familia sea respetada por todos los medios de comunicación, a la espera de que se lleven a cabo las investigaciones iniciadas por las autoridades".

De esta forma Otamendi se convirtió en el segundo jugador de la selección en sufrir un asalto en su casa. En marzo de este años Ángel Di María fue victima de un asalto en su casa de París de dónde los ladrones se llevaron 500 mil euros.