La Fiscalía General del Estado de Nayarit confirmó que son 14 las víctimas fatales provocadas por la explosión de un camión cisterna que transportaba gas licuado de petróleo (GLP) en la autopista Tepic-Guadalajara.
“En este momento estamos en condiciones de confirmar a una persona fallecida más, por lo que el saldo total asciende a 14 como resultado del lamentable accidente en la autopista Tepic-Guadalajara esta mañana. Seguiremos informando”, señaló la dependencia en su cuenta de Twitter.

Además del trailer con doble acoplado, tres vehículos se vieron afectados por la explosión que impactó en alrededor de dos hectáreas, indicó la Fiscalía del Estado en un comunicado.
Los vehículos, uno de ellos una camioneta, quedaron tan calcinados que “no se observan placas, colores, ni mayores características”, agrega la nota de ese departamento.

El suceso tuvo lugar la mañana del lunes a altura del municipio de Jala, en Nayarit, en una autopista que atraviesa una zona montañosa y conecta la capital de ese pequeño estado de la costa del Pacífico con Guadalajara, la capital de Jalisco.

En su último reporte, la Fiscalía informó que seis cuerpos fueron encontrados en el interior de la camioneta, tres en uno de los vehículos y otros tres en otro coche. Otro cadáver quedó sobre el asfalto, aparentemente, el del conductor o copiloto del camión cisterna.

La Secretaría de Seguridad del Estado del estado de Nayarit, la primera en informar del accidente, indicó en un comunicado que las investigaciones preliminares apuntan a que el tráiler, que circulaba en dirección a Guadalajara, perdió el control y volcó en la parte media de la autopista antes de explotar y arder.

Los cuerpos quedaron tan quemados que su identidad tendrá que ser determinada por ADN.
Las autoridades desplegaron más de 30 efectivos de distintos departamentos y equipos caninos para buscar otras posibles víctimas, ya que el ingreso a algunas zonas era complicado por lo caliente del suelo.

Los accidentes de camiones con doble remolque, es decir, una cabina y dos cajas, han sido habituales en México y varios colectivos han alertado de su peligrosidad e intentado que se prohíban.