Contraataque: China ordena cierre del consulado de EE.UU. en Chengdu
Temor por la escalada del conflicto entre las dos potencias en plena pandemia.
El gobierno de China ordenó el cierre del consulado de Estados Unidos en la localidad de Chengdu, se informó oficialmente este viernes.
El Ministerio de Asuntos Exteriores de China le pidió a la embajada de los Estados Unidos el viernes por la mañana que cerrara su consulado en la ciudad suroeste de Chengdu, días después que Washington ordenó abruptamente el cierre del consulado chino en Houston, Texas.
"El Ministerio de Asuntos Exteriores de China informó a la embajada de EE.UU. en China de su decisión de retirar su consentimiento para el establecimiento y funcionamiento del Consulado General de los Estados Unidos en Chengdu", indicó en una declaración.
"El Ministerio también hizo requerimientos específicos sobre el cese de todas las operaciones y eventos del Consulado General", acotó.
Chengdú es la capital de la provincia de Sichuan, en el suroeste de China, y su principal atractivo es la famosa Base de Investigación de Crianza de Pandas Gigantes, un centro protegido donde los visitantes pueden ver a los pandas gigantes en un hábitat natural.
Ayer jueves, el secretario de Estado norteamericano, Mike Pompeo, dijo que el consulado chino en Houston era un centro de espionaje para obtener secretos comerciales.
"Esta semana cerramos el consulado de China en Houston porque era un centro de espionaje y robo de propiedad intelectual", dijo Pompeo en un discurso en California, en el que pidió a las "naciones libres" del mundo a triunfar sobre la amenaza de lo que consideró una "nueva tiranía" del gigante asiático.
En medio de la caída en las encuestas para las elecciones presidenciales de noviembre, la administración de Donald Trump se empeña por retomar ejes de confrontación que en el pasado han rendido buenos dividendos al mandatario. Lo cierto es que luego de un período de cierta tranquilidad en las relaciones entre los dos gigantes del mundo, los analistas internacionales temen por las consecuencias que este conflicto genere sobre una economía mundial que sufre la caída de actividad más grande de la historia.