Cuando Juan Pablo II vio de cerca a la muerte: a 41 años del atentado
Este viernes se cumple aniversario del intento de homicidio al Santo Pontífice en 1981. En la plaza de San Pedro de la ciudad del Vaticano Mehmet Ali Ağca disparó cuatro veces. Fue condenado a perpetua pero luego indultado y deportado a Turquía.
El intento de asesinato contra Juan Pablo II tuvo lugar el miércoles 13 de mayo de 1981, en la plaza de San Pedro de la Ciudad del Vaticano.
Mehmet Ali Ağca, exmiembro del grupo de extrema derecha Lobos grises disparó con una pistola semiautomática Browning Hi-Power, calibre 9 mm contra el papa cuatro veces mientras este entraba en la plaza. A causa de los graves disparos, el Papa perdió bastante sangre y tuvo que ser hospitalizado.
Ağca fue apresado inmediatamente y sentenciado a cadena perpetua por un juzgado italiano. Posteriormente el Santo Pontífice perdonó a Ağca por haber intentado asesinarlo. El presidente italiano Carlo Azeglio Ciampi otorgó el indulto a Ağca a petición del papa, tras lo cual fue deportado a Turquía en junio del 2000.
Una monja y varios testigos (dos vestidos de cardenales) le impidieron tanto disparar más veces como escapar. Fue atrapado por Camillo Cibin, el jefe de seguridad del Cuerpo de Gendarmería de la Ciudad del Vaticano.
Sin embargo, Juan Pablo II fue alcanzado por cuatro balas, dos de las cuales se alojaron en su estómago, otra le alcanzó en el brazo derecho y la última en la mano izquierda. Dos espectadores resultaban heridos a causa de las balas perdidas del otro sicario que acompañaba a Ağca, Oral Çelik.
Uno de los heridos fue Ann Odre, de Buffalo, Nueva York, que recibía una bala en el pecho, y la otra, Rose Hill, de Jamaica, quien sufría una herida superficial en el brazo.
El papa fue llevado al Palacio Apostólico para un primer diagnóstico, ya que exteriormente la herida no parecía seria. Pero una vez que se midió su pulso y presión fue evidente que estaba en peligro y se avisó a una ambulancia. A pesar de que la bala había evitado tanto la aorta abdominal como la arteria mesentérica, había perdido casi el 75% de su sangre, sufriendo un shock por desangramiento, debido a la perforación intestinal.
Fue operado por el Dr. Francesco Crucitti en el Policlínico Universitario Agostino Gemelli, el centro traumatológico afiliado a la escuela de Medicina de la Universidad del Sagrado Corazón.
Desde su cama del hospital donde estuvo internado, el Papa grabó un mensaje en que se dirigió a los peregrinos que asistían a la Plaza San Pedro: "Les doy las gracias con emoción por sus oraciones y les bendigo a todos. Rezo por el hermano que me atacó, al que he perdonado sinceramente".
Cuando estuvo con Juan Pablo II en la prisión Rebibbia de Roma la primera vez después de su intento de asesinarlo, Ağca, le preguntó cómo había conseguido sobrevivir. El Papa, que había estado consciente hasta el momento de entrar en el quirófano, dijo haber presentido que sobreviviría, creyendo de corazón en la intercesión de la Virgen María, Nuestra Señora de Fátima, quien, en una de sus apariciones a los tres niños había profetizado que un "Obispo de blanco" sería atacado.
El segundo ataque lo sufrió el 2 de mayo de 1982, cuando el sacerdote integrista y de ideología de derecha radical Juan Fernández Krohn intentó apuñalarlo con una bayoneta de 37 centímetros en el santuario de Fátima en Portugal, pero el agresor fue arrestado inmediatamente por personal de seguridad.
Paradójicamente, el pontífice había acudido a ese lugar para entregar como ofrenda a la Virgen una de las balas que lo había herido en el atentado anterior.
Giras papales
Durante sus 27 años de papado, Juan Pablo II realizó más de 105 viajes fuera de Italia, visitando más de 129 países, aunque nunca pudo viajar a China ni a Rusia.
Wojtyla visitó en dos oportunidades la Argentina, la primera el 11 de junio de 1982, en plena guerra con Gran Bretaña por las islas Malvinas, trayendo un mensaje de paz, y el 6 de abril de 1987, para presidir la Jornada Mundial de la Juventud.
Juan Pablo II murió el el 2 de abril de 2005.
Se estima que seis días después de su muerte, un millón de fieles llegaron a la Plaza de San Pedro para vitorear al pontífice y exigir al Vaticano su beatificación, durante el entierro más grande que se tenga memoria de un papa.
El 27 de diciembre de 2014, Agca fue fotografiado llevando un ramo de flores para poner en la tumba de Juan Pablo II en el Vaticano, justamente cuando se cumplía el trigésimo primer aniversario de que el fallecido Papa lo visitó en la cárcel.