El presidente estadounidense, Donald Trump, anunció hoy que el 15 de enero firmará la "muy grande y amplia" fase uno del acuerdo comercial entre China y Estados Unidos en la Casa Blanca con la presencia de funcionarios chinos, pero sin el presidente Xi Jinping.

"Firmaré nuestra muy grande y amplia fase uno del acuerdo comercial con China el 15 de enero. La ceremonia tendrá lugar en la Casa Blanca. Representantes de alto nivel de China estarán presentes", informó Trump en su cuenta de Twitter.

En un primer momento, el mandatario había apuntado que el acto de ratificación del acuerdo contaría con la presencia de Xi. "En una fecha más tarde, viajaré a Beijing, donde comenzarán las conversaciones para la segunda fase", agregó.

Tras casi 18 meses de guerra comercial y la consiguiente escalada de aranceles, Trump anunció a mediados de diciembre el cierre de la primera fase de un pacto con China, que incluye la retirada parcial de los gravámenes y el aumento de las compras chinas de productos nacionales.

El viceministro de Comercio chino, Wang Shouwen, confirmó por su parte que la primera fase del pacto aborda temas como la transferencia de tecnología, la propiedad intelectual, la expansión del comercio y el establecimiento de mecanismos para la resolución de disputas, entre otros.

Los detalles del acuerdo

Tanto Washington como Beijing se han comprometido a retirar por etapas los aranceles que ambas partes se han ido imponiendo durante la disputa. El acuerdo implica, sin embargo, que se mantienen aranceles estadounidenses del 25 por ciento a importaciones chinas valoradas en 250 mil millones de dólares, junto con unos gravámenes reducidos del 7,5 por ciento a importaciones adicionales valoradas en aproximadamente 120 mil millones de dólares. 

Las negociaciones entre ambas partes han sufrido varios sobresaltos, con informaciones contradictorias y críticas veladas, desde que en octubre se anunció un principio de acuerdo. 

Las tensiones comerciales entre las dos mayorías economías mundiales, que comenzaron el año pasado, han tenido profundas consecuencias. En sus últimas previsiones de crecimiento mundial, publicadas en octubre, el Fondo Monetario Internacional (FMI) rebajó sus proyecciones de expansión al 3 por ciento este año, dos décimas menos que en julio, lastradas por las dudas que ha generado esta disputa.