Francisco: "La democracia no goza de buena salud en el mundo actual"
En la sesión de clausura de la 50ª Semana Social de los católicos en Italia, el papa habló sobre los cambios sociales.
Para Francisco, la democracia se ha debilitado en el mundo.
El papa brindó un discurso en el Centro de Congresos de Trieste con los participantes en la sesión de clausura de la 50ª Semana Social de los católicos en Italia.
El Pontífice recordó al beato Giuseppe Toniolo y afirmó que la democracia puede definirse como "aquel orden civil en el que todas las fuerzas sociales, jurídicas y económicas, en la plenitud de su desarrollo jerárquico, cooperan proporcionalmente al bien común, revirtiendo en el resultado final en beneficio predominante de las clases inferiores".
“A la luz de esta definición, es evidente que la democracia no goza de buena salud en el mundo actual. Esto nos interesa y preocupa, porque está en juego el bien del hombre, y nada de lo que es humano puede sernos ajeno”, agregó.
“De hecho, así como la crisis de la democracia es transversal a las distintas realidades y naciones, del mismo modo la actitud de responsabilidad ante las transformaciones sociales es una llamada dirigida a todos los cristianos, dondequiera que se encuentren viviendo y trabajando, en todas las partes del mundo”, argumentó.
También citó a Aldo Moro: "un Estado no es verdaderamente democrático si no está al servicio del hombre, si no tiene como fin supremo la dignidad, la libertad y la autonomía de la persona humana, si no es respetuoso con aquellas formaciones sociales en las que la persona humana se desarrolla libremente y en las que integra su personalidad".
“La propia palabra ‘democracia’ no coincide simplemente con el voto del pueblo, sino que exige que se creen las condiciones para que todos puedan expresarse y participar”, culminó.