La Luna puede esperar: por una fuga de combustible, suspenden el despegue del Artemis I
La cuenta regresiva fue detenida luego de que las alarmas advirtieran la pérdida de hidrógeno. Cincuenta años después del último vuelo de Apollo, la misión iba a marcar el lanzamiento del programa estadounidense para volver a explorar el lecho lunar.
El lanzamiento del Artemis I, el cohete más poderoso jamás construido para una misión de seis semanas en el espacio, previsto para las 9.33 de este lunes, debió suspenderse, luego de que se detectara una fuga de combustible de hidrógeno, según informó la NASA.
"El lanzamiento de #Artemis I ya no se llevará a cabo hoy en día, ya que los equipos están trabajando en un problema con una purga del motor. Los equipos continuarán recopilando datos y lo mantendremos informado sobre el momento del próximo intento de lanzamiento", detallaron en su cuenta de Twitter.
Los controladores de vuelo detuvieron la operación de repostaje, con una hora de retraso por la presencia de tormentas en el mar. El proceso se reanudó lentamente para certificar si la fuga de combustible se mantenía tal como había sucedido durante las pruebas, cuando las alarmas forzaron la suspensión temporal.
Minutos antes. través de su cuenta de Twitter, la NASA había detallado que "el reloj de la cuenta regresiva está detenido en T-40 minutos. El equipo de hidrógeno de @NASA_SLS está discutiendo los planes con la directora de lanzamiento de #Artemis I".
Según informo CNN en español, el equipo de lanzamiento también ha descubierto un problema con una purga de motor en uno de los cuatro motores del cohete y está trabajando para reconfigurarlo. Hasta ahora, sus esfuerzos no han sido efectivos.
Durante las purgas del motor, el hidrógeno circula por el motor para acondicionarlo para el lanzamiento. Tres de los cuatro motores están funcionando como se esperaba, pero el motor n.º 3 tiene un problema. El equipo también descubrió una línea de escarcha en el borde interior del escenario. La escarcha puede indicar la presencia de una grieta.
El problema podría afectar el comienzo del conteo de terminales, o la cuenta regresiva que comienza cuando quedan 10 minutos en el reloj antes del despegue. Pero los ingenieros confían en resolver el problema antes del conteo de terminales, según la NASA.
También se registraron algunos problemas en las comunicaciones de la cápsula Orion. El domingo, una demora de 11 minutos en las comunicaciones entre el Control de Lanzamiento y la Orion también generó preocupación, aunque ya fue resuelto y la NASA debía determinar el origen del problema.
Los ingenieros trataban de comprender una demora de 11 minutos en las comunicaciones entre el Control de Lanzamiento y la Orion detectado el domingo por la tarde. Aunque el problema se había resuelto para el lunes por la mañana, la NASA necesitaba saber su origen antes de ejecutar un lanzamiento.
Cincuenta años después del último vuelo de Apollo, la misión Artemis 1 marcará el lanzamiento del programa estadounidense para volver a la Luna, y que luego podría permitir ir a Marte a bordo de la misma nave. Con 98 metros de altura, el cohete SLS de color naranja y blanco no podrá despegar si hay lluvia o tormentas eléctricas.
La cápsula Orion, no tripulada, será puesta en órbita alrededor de la Luna para asegurarse de que es segura para los futuros astronautas, entre lo que figurará la primera mujer y a la primera persona negra en pisar la superficie lunar.
El despegue desde la plataforma de lanzamiento 39B en el Centro Espacial Kennedy, deberá demorarse aunque aún la Nasa no informó por cuánto tiempo. Desde la noche del domingo y hasta la madrugada de este lunes, más de tres millones de litros de hidrógeno líquido y oxígeno abastecieron los tanques de combustible.
Quien dará la luz verde definitiva será Charlie Blackwell-Thompson, la primera mujer en dirigir un lanzamiento en la NASA. Las mujeres representan el 30% de la fuerza laboral dentro de la sala de despegue, en contraste con el Apollo 11, donde participó solo una mujer.
De acuerdo a las previsiones, una vez que se reanude la cuenta regresiva, dos minutos después del lanzamiento, los propulsores regresarán a la Tierra para caer en el Atlántico y ocho minutos después, el segmento principal se separará y aproximadamente una hora y media después, un último impulso enviará la cápsula rumbo a la Luna, adonde tardará varios días en arribar.