Trump y Bolsonaro celebran “el ocaso del socialismo” en el continente
Contraponen el sistema a “la democracia” que se atribuyen representar. Venezuela, en el eje de la visita a la Casa Blanca.
Que la primera salida oficial al exterior, como presidente de Brasil, haya sido a Estados Unidos, no es una cuestión secundaria, pero tampoco sorpresiva.
Jair Bolsonaro nunca ocultó su admiración hacia su par, Donald Trump, y este martes fue recibido en la misma Casa Blanca.
Sin discutir siquiera una coma, ambos presidentes brindaron una conferencia de prensa conjunta, en la que la “liberación” de Venezuela fue, paradójicamente, una cuestión central.
La visita brasileña sirvió para certificar que los estadounidenses tendrán acceso a la base militar de Alcántara, un sueño que ni en la dictadura pudo concretar el país del norte, y para hacer más cercano el sueño de ingresar como país aliado a la OTAN.
Bolsonaro se encargó de autodenominarse como “un amigo” de los estadounidenses, extendiendo la visión de aliado, y no ocultó su felicidad, ya que fue alojado con honores en la Casa Blanca.
Ambos se encargaron de apuntar contra “el socialismo”, casi exceptuando de que se tratara de un sistema político, diferenciándolo de “la democracia” que aducen representar.