En la Universidad Nacional de Córdoba no volverán a la presencialidad este año, mientras que para el próximo, ya evalúan algunas alternativas.

Sin clases presenciales, el movimiento se vio casi paralizado en ciudad universitaria y dependencias descentralizadas, como así también en la zona de Nueva Córdoba y Alberdi, barrios con mucha afluencia universitaria.

A pesar de que el Gobierno nacional permitió –con limitaciones– el regreso a las clases presenciales, ninguna de las universidades nacionales cordobesas retomará esta modalidad en lo que resta de este año.

Sin embargo, la disposición abrió el camino para el regreso a los claustros, que sería muy gradual en 2021.

Estas medidas abren una seria de interrogantes sobre ¿Cuáles son los criterios que se aplicarán? ¿Cómo se adaptarán los edificios, sobre todo donde las clases suelen ser masivas, para garantizar las medidas sanitarias? y ¿ Cuáles serán los protocolos a aplicar en el caso de alunas actividades que puedan ser presenciales?

Con el primer objetivo que es el de monitorear la situación epidemiológica, el Rector de la Universidad Nacional de Córdoba (UNC), Hugo Juri, señaló que el regreso “es una situación complicada y debe analizarse con mucho cuidado; y en eso se está trabajando”.

“Tenemos que tomar todos los recaudos y estar listos para el mejor y para el peor escenario. En el medio, hay infinidad de opciones. Como primera medida, se tienen que garantizar todos los protocolos, la capacitación para las personas que se encargan de la limpieza y la adaptación de baños y de aulas. También hay que tener en cuenta lo que está sucediendo en Europa, con la segunda ola de contagios”, dijo el rector.

En su momento también se informó desde la UNC sobre el diseño de un esquema excepcional para adaptar las aulas a la nueva normalidad y garantizar las condiciones de distanciamiento para estudiantes, docentes y para quienes trabajan en áreas de investigación.

De todas maneras desde el Rectorado insisten en que el regreso –sin fecha aún– no será masivo, sino que se definirá de acuerdo con criterios académicos, informáticos y edilicios.

Se admite que, en este contexto sanitario, recibir a unos 120 mil estudiantes de un día para el otro generaría complicaciones y riesgos.

Por su parte, la Facultad de Ciencias Exactas, Físicas y Naturales de la UNC evalúan diversas alternativas para la reincorporación de los estudiantes.

Su Decano, el Ingeniero Pablo Recabarren explicó que los criterios en estudio son el académico con la continuidad de la formación desde la virtualidad y comenzar a habilitar actividades de formación que exigen presencialidad sólo en casos excepcionales.

Recabarren explicó que "en una primera etapa de 2021 habrá que restringir la presencialidad a lo estrictamente necesario”.

“La idea es trabajar todo lo que se puede de manera virtual e ir incorporando los trabajos prácticos y los exámenes a algo más presencial, de a poco. Luego tendría que haber una etapa intermedia y semipresencial, cumpliendo con el protocolo”, señaló. Recabarren.

Asimismo ejemplificó que un retorno masivo implicaría tener que duplicar la capacidad edilicia de esa unidad académica para cumplir con los protocolos vigentes.

"El retorno a las actividades presenciales anunciado por autoridades nacionales es algo que debemos tomar con inmensa alegría, pero también con la cautela que el cuidado de la salud comunitaria impone", remarcó el Decano.

Todos los días por Canal 10 te informamos desde Canal U con el equipo de Data Universitaria: Mónica Reviglio y Sergio Antoniazzi.

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