Robo millonario a un camión de caudales en la puerta de un banco
Ocurrió en la localidad bonaerense de Lomas del Mirador. Cuatro delincuentes se quedaron con 4 millones de pesos.
Un grupo comando integrado por al menos cuatro delincuentes armados asaltó un camión de caudales cuando llegaba a un banco de la localidad bonaerense de Lomas del Mirador y en pocos minutos y sin disparar un solo tiro robó tres sacas con unos cuatro millones de pesos, informaron fuentes policiales y judiciales.
El hecho ocurrió 8.30, antes del horario de apertura de la sucursal del Banco Supervielle situada en avenida Mosconi, casi esquina Alvear, en una zona comercial de dicha localidad del partido de La Matanza, en el oeste del conurbano, donde varios clientes esperaban en la puerta de la entidad para ingresar.
Según las fuentes policiales y judiciales, todo comenzó cuando un camión de la empresa Prosegur llegó al lugar y tres empleados descendieron para llevar dinero adentro del banco.
Como es habitual en este tipo de casos, dos custodios armados se pusieron a ambos lados del camión mientras un portavalores trasladaba tres sacas con el efectivo, dijeron los informantes.
En esas circunstancias, al menos cuatro delincuentes armados los sorprendieron con intenciones de robo y se apoderaron de sus armas de fuego y las tres sacas con el dinero ante la mirada de los clientes que hacían fila para entrar.
De hecho, dos de los asaltantes estaban entre las personas que esperaban en la puerta y el resto simulaba ser transeúntes que pasaban por el lugar, por lo que para los investigadores la banda tenía un plan elaborado previamente y no actuó al voleo.
Un testigo contó que una vez que los ladrones se hicieron del botín se escaparon a la carrera y subieron a un vehículo estacionado cerca de la esquina, a bordo del cual los esperaban unos cómplices y en el que huyeron a toda velocidad.
Por otra parte, esta tarde fue hallado abandonado en Lomas del Mirador el auto bordó utilizado en la fuga y en el que los peritos de la Policía Científica buscaban rastros de los delincuentes como huellas y material genético para un posterior cotejo de ADN.
A su vez, los pesquisas trabajaban en la identificación del otro vehículo que empleó la banda para completar la fuga.