Tras un allanamiento, rescatan más de 60 aves silvestres en Traslasierra
La Policía Ambiental trabajó en cuatro domicilios. Los pájaros fueron trasladados a la reserva Tatú Carreta para un control sanitario.
Efectivos de la Policía Ambiental realizaron operativos en el Valle de Traslasierra para controlar y concientizar a los ciudadanos sobre la no tenencia de fauna silvestre como mascota. El objetivo es concientizar sobre las aves, que ocupan el primer lugar en la lista de especies elegidas para el tráfico.
Además, se realizó una serie de allanamientos en cuatro domicilios junto a agentes del Ministerio de Coordinación y la Policía de la Provincia. En esa instancia se rescataron más de 60 aves silvestres.
En Villa Sarmiento, las inspectoras de Policía Ambiental junto con la Patrulla Rural de San Alberto allanaron una vivienda y secuestraron 12 pájaros. Entre ellos había un cardenal amarillo, especie en peligro de extinción.
Posteriormente, en la localidad de San Vicente se recuperaron 26 aves como resultado de dos allanamientos y cuatro entregas voluntarias. Entre los ejemplares había un loro hablador, otra especie cuya conservación se encuentra comprometida.
En Mina Clavero se recibieron otros tres pájaros. Y en La Paz, finalmente, se inspeccionó una propiedad en la que había nueve aves cautivas y otras tres se entregaron voluntariamente.
“Pese a que en el territorio cordobés está prohibida la tenencia de fauna silvestre como mascota (autóctona o exótica) existen muchas personas que aun así tienen arraigada esta práctica como una cuestión cultural”, dijo el director de Policía Ambiental, Adrián Rinaudo.
Y agregó: “Por este motivo, además de controlar también le brindamos a la comunidad información sobre el daño que le ocasiona a las especies y al ambiente la tenencia ilegal y les otorgamos, por única vez, la posibilidad de entregarnos voluntariamente ejemplares que tuvieran en cautiverio".
Las especies secuestradas fueron: reinamora, pepitero de collar, jilguero, rey del bosque, vira vira, corbatita, brasita de fuego, piquito de oro, cabecita negra, diuca, luicito, cruzado, loro hablador y cardenal amarillo. Todas las aves fueron llevadas la reserva Tatú Carreta para su examen sanitario y cuarentena protocolar.