Luego de la violenta manifestación que protagonizaron los empleados municipales el pasado miércoles, que dejó como saldo un trabajador despedido por el intendente Martín Llaryora y un verdulero de Barrio Observatorio brutalmente golpeado, la comisión directiva del gremio se reunió con la familia del comerciante.

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"El diálogo que tuvimos con la familia es muy distinto a lo que expresa tanto el intendente como algunas entidades empresariales, como la Cámara de Comercio o el Centro de Almaceneros", expresó. Sostuvo además que "la familia habló con el corazón abierto, nosotros también, y fue un diálogo bastante fructífero. No es como plantean los medios una situación de guerra",  indicó en declaraciones a Radio Universidad.

Por último, Bizzi expresó que se hizo una utilización política del caso por parte de las autoridades municipales y de la Cámara de Comercio ya que la misma, según indicó, "tiene un funcionario dentro de la Municipalidad".

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