Este sábado, el Gobierno Nacional discutió con gobernadores la implementación del Plan Estratégico de Vacunación que prevé la inmunización de 24 millones de argentinos contra el COVID-19 de manera gratuita, equitativa e igualitaria.

La campaña de vacunación será voluntaria y se llevará a cabo a través de varias etapas. La inmunización se realizará incluso en aquellas personas que ya sufrieron la enfermedad.

Las vacunas y el material descartable necesario serán provistos por el Estado Nacional para todos los que integren la población objetivo, independientemente de la cobertura sanitaria y su nacionalidad.

El plan iniciará en los grandes aglomerados urbanos, donde la evidencia indica que se presenta una mayor proporción de casos confirmados, con transmisión comunitaria sostenida y las mayores tasas brutas de mortalidad. A su vez, se priorizará al personal de salud y otras poblaciones estratégicas según el criterio de cada provincia.

Otros criterios a tener en cuenta son adultos de 70 años y más; personas mayores residentes en hogares de larga estancia, adultos de 60 a 69 años, adultos 18 a 59 años de grupos en riesgo. Y, teniendo en cuenta los criterios de vulnerabilidad, los barrios populares, las personas en situación de calle, pueblos originarios, personas privadas de libertad, migrantes, docentes universitarios, entre otros grupos.

El criterio de distribución de las vacunas se realizará en base al consenso con las provincias.

El total de dosis estimada es de 54.431.000. Considerando que un esquema consta de la aplicación de dos dosis, calculando una tasa de pérdida estimativa del 15% (promedio entre presentaciones monodosis y viales multidosis) se alcanzaría a vacunar 23.000.000 o 24.000.000 de personas.