Cómo evoluciona el estado de las sierras luego de la sequía
Luego de un año con pocas lluvias, Córdoba ya vuelve a tener precipitaciones y va, de a poco, curándose por los meses que sufrió. El ingeniero civil Marcelo García hizo un análisis sobre el tema y cómo se vienen las precipitaciones esta temporada.
El 2020 fue un año sumamente particular para Córdoba y sus sierras. La falta de lluvias y los importantes incendios formaron un combo sumamente grave para la provincia.
Afortunadamente, las lluvias llegaron y son cada vez más constantes. Noviembre y Diciembre fueron dos meses importantes a nivel precipitaciones y eso calmó mucho, aunque todavía no es suficiente.
De ese tema habló Marcelo García, ingeniero civil, en "Es por acá" de Radio Universidad. El especialista destacó que la situación crítica no fue tanto la cantidad de lluvias en sí sino la amplitud del período de sequía:
"Nuestras cuencas se alimentan en su mayoría de lo que llueve en las sierras, que necesitan estar húmedas y el problema fue que desde Marzo hasta Noviembre estuvo por debajo de los valores medios"
A su vez, señalo que "las cuencas no tienen memoria", es decir que no hay una reserva infinita, por lo cual es necesario que la cuenca esté húmeda y si el período sin lluvias es muy largo, en consecuencia, afectará de forma marcada en los niveles de los ríos.
García destacó que Noviembre y Diciembre fueron meses sumamente favorables y, a su vez, detalló que para retomar los niveles habituales en el Lago San Roque se necesitan aproximadamente 350 mm de lluvia en lo que resta de la temporada, es decir hasta el 30 de Abril.
Ante esta situación, el ingeniero civil fue optimista: "Se espera que Enero, Febrero, Marzo y Abril estén en la media o un poco más alto y si eso sucede estaríamos recuperando el nivel del vertedero del Dique San Roque".
Las consecuencias de los incendios
Por otro lado, Marcelo García advirtió que los incendios lógicamente influyen en la sequía y que las consecuencias que generaron no se van a resolver rápidamente sino que siguen por mucho tiempo. "Tenemos que recuperar la vegetación y el suelo y eso lleva tiempo", agregó.
Explicó, además lo que genera la falta de vegetación en las sierras: "Cuando llueve escurre mucho más, lo cual no afecta al nivel del embalse pero sí al de los ríos, y vamos a tener mayor erosión y transporte de sedimentos y cenizas"
El cambio climático
El especialista apuntó que se ve un impacto sobre los totales de lluvia, lo que probablemente no se ve en la cantidad máxima de lluvia que puede caer: "Significaría que vamos a tener más eventos de lluvias pero que no serán más intensos que otras veces"
En este marco, el ingeniero civil destacó que, ante el inesperado cambio climático, los registros históricos sobre las lluvias ya no son tan relevantes para calcular sobre eventos futuros: "Antes teníamos en cuenta el máximo histórico, ahora ya no es tan representativo porque estamos en un proceso de variabilidad y cambio climático"
Medir el consumo de agua
Por último, García hizo hincapié a que la gente ayude en estos aspectos midiendo el consumo de agua de red: "Con un techo de 100 metros cuadrados, con una lluvia de 10 milímetros, nos queda un tanque de 1000 litros disponibles para regar, entonces si podemos almacenar esa agua de lluvia y usamos 50 litros por día, tenemos 20 días para regar las plantas y abastecer el consumo"