En la ciudad de General Deheza se determinó el hisopado y aislamiento de 67 personas por cuatro casos sospechosos de Covid-19. 

La decisión la tomaron el martes el intendente Franco Morra y la directora del Hospital de la Comunidad de General Deheza, Natalia Herrera Piozzi, quienes informaron sobre la existencia de esos casos sospechosos.

Se trata de cuatro hermanos, dos de los cuales estuvieron en los últimos días en Villa María, y en contacto estrecho con un familiar que dio positivo al test de coronavirus.

Por ello, inmediatamente, las autoridades dispusieron un operativo cerrojo en el sector donde habitan estas personas, en un complejo de departamentos, y someter a hisopados a 20 personas que viven en dicho lugar, además de proceder a la desinfección de espacios internos, como así también de calles y veredas aledañas, informa el Puntal Villa María.

Sin embargo, tras realizarse todo el despliegue, por la noche del martes se conoció que un tercer joven que viajó con los dos hermanos a Villa María compartió el remis y participó de un asado que se realizó por el Día del Amigo del que habrían participado alrededor de 20 jóvenes, por lo que se comenzó a trabajar en la localización de esas personas.. 

El intendente, en conferencia de prensa, manifestó su malestar por una “irresponsabilidad”, y señaló: “Hoy en General Deheza hemos aislado a 67 personas, de las cuales 32 tienen relación directa con el complejo habitacional con los dos hermanos de los cuatro que viajaron a Villa María y 35 personas, con el tercer habitante de General Deheza, que también viajó a Villa María, en el mismo remís, y tras regresar compartió un asado por el Día del Amigo en una casa particular".

Sobre el accionar de los dos hermanos que viajaron, indicó que éstos “ya sabían que viajaban a una casa donde había al menos una persona hisopada. Y a raíz de esto es que viajaron sólo dos de los cuatro hermanos. Los otros dos se quedaron en Deheza".

El intendente dijo estar decepcionado, pues precisó que las autoridades municipales, sanitarias, bomberos y demás trabajadores están poniendo esfuerzo y exponiendo su salud para prevenir y ocurren este tipo de hechos “inexplicables” que ponen en riesgo a toda la población.

“No nos merecemos que nos mientan”, enfatizó el intendente y apuntó a la situación del tercer joven que viajó Villa María y participó del asado.

“Nadie le garantiza a ese joven que compartió el asado, con el aval de sus padres, que no haya contagiado a su abuelo. Nadie nos garantiza que eso que parece una liberalidad, que se pregona a veces, no nos llegue adentro del geriátrico. Y de qué nos vamos a disfrazar cuando esas cosas nos pasen”, apuntó Morra.

Ahora, se aguardan los resultados de los estudios epidemiológicos.