Los complejos de cabañas se imponen sobre los hoteles
Entre las limitaciones para viajar al exterior y los temores por contagios de coronavirus los turistas optan por lugares alejados.
Las dificultades del turismo en medio de la pandemia por coronavirus, que amenaza con un segunda ola en Argentina, provocaron cambios en las demandas de los viajeros.
Gustavo Beggiato, de Beggia Turismo, dijo que las operaciones se encuentran a un 15% de lo que representa una temporada habitual de verano.
"Al estar cerrada la frontera de Brasil que mueve mucha gente, con las restricciones y temores por lo que puede pasar, la gente cancela o decide prorrogar su viaje", explicó en diálogo con Canal 10.
El viernes el gobierno nacional extendió el cierre de fronteras y redujo al 30% las operaciones en el aeropuerto de Ezeiza. También rige la obligación de un hisopado previo a retornar al país y una cuarentena posterior de 7 días. A lo que se debe agregar las disposiciones sanitarias del destino elegido.
"Tenemos la voluntad de poder completar la temporada de verano hasta marzo", dijo el ministro de Turismo, Matias Lammens el viernes en conferencia de prensa. A través de un decreto la Nación se pidió a las provincias que restrinjan la circulación nocturna para controlar los brotes del Covid-19.
Por otra parte Beggiato dijo que el panorama turístico en argentina se orientó hacia los complejos de cabañas más que a los hoteles.
"Quizás la gente está buscando un tipo de alojamiento natural, alejado, dónde no hay grandes grupos de gente", comentó el operador turístico. En cambio remarcó que los hoteles de Los hoteles de media y baja gama "están sufriendo las peores consecuencias".