Ocho trabajadoras sociales fueron desvinculadas de la Municipalidad de Córdoba
El colegio que nuclea a las trabajadoras denuncia una "situación de precarización laboral y violencia institucional".
Ocho trabajadoras sociales contratadas por la Municipalidad de Córdoba fueron despedidas.
El Colegio de Profesionales en Servicio Social de la Provincia de Córdoba (CPSSPC) repudió la situación. Además, sostienen que es “una nueva situación de precarización laboral y violencia institucional hacia colegas” porque de 10 trabajadoras contratadas las 8 despedidas fueron las que participaron en asambleas.
Las trabajadoras fueron contratadas bajo monotributo en octubre para los Centros de Salud de la Direccion de Atencion Primaria de la Salud (DAPS) de la Secretaría de Atención y Prevención de Salud Comunitaria. En total, habían contratado a 10 personas.
“Las colegas incorporadas fueron asignadas a 10 Centros de Salud con el objetivo de fortalecer la atención comunitaria de la salud pública”, remarcaron.
Y agregaron: “Algunas renunciaron a otros espacios laborales para apostar al nuevo, otras tienen hijos y/o familiares a cargo y al día de la fecha se encuentran sin cobrar los meses trabajados”.
Marta Fabing, coordinadora de trabajo social en las DAPS, afirmó que la labor de las trabajadoras es esencial ya que atienden situaciones de vulnerabilidad social como violencia de género, el hambre o la indigencia.
“Somos el lugar más cercano donde la gente se atiende”, expresó en Es por Acá por Radio Universidad.
Fabing comentó que la Municipalidad necesitaba incorporar trabajadoras sociales ya que las últimas se habían jubilado y no se renovaba la planta. Entonces, lanzaron una convocatoria a través del colegio para poder garantizar que estén matriculadas, su idoneidad en atención primaria y que no tengan sanciones.
Desde el colegio, aclararon que las ocho trabajadoras despedidas habían participado de instancias de asambleas mientras que las otras dos estaban de carpeta médicas y no fueron desvinculadas. Por lo tanto, resaltaron la situación de violencia institucional sufrida.
Por otro lado, desde el Sindicato Union Obreros y Empleados Municipales (Suoem) manifestaron: “en el día de hoy se va a realizar una reunión con las autoridades por ese tema para agotar la instancia de diálogo. En función de los resultados que tenga la reunión, se decidirá el lunes cómo se continúa”.
Las trabajadoras denuncian:
- Falta de pago de meses trabajados (octubre, noviembre, diciembre).
- Escasos equipos de trabajo interdisciplinarios en los Centros de Salud.
- Exigencia de cumplimiento horario en condición de prestadoras de servicios.
- Exigencia de pago de seguro de vida, monotributo e impuesto a sello.
- Honorarios por debajo de los valores establecidos en el nomenclador de prestaciones profesionales de Trabajo Social y por debajo de la canasta básica.
- Prohibición de participar en espacios colectivos de trabajadores municipales.
“Estas formas de precarización las veníamos viendo hace años en la Provincia. En la Municipalidad, en atención primaria no había esta forma de monotributo. Ahora hay servicios que antes lo hacíamos y ahora no”, opinó Fabing.