Sexo y crisis: la situación económica complica la cama de los cordobeses
La especialista Silvia Aguirre cuenta que aumentaron las consultas por problemas sexuales en los últimos años.
En agosto de 2016, Daniel Scioli dijo que en épocas de crisis baja el deseo sexual. La frase desató todo tipo de bromas, pero ¿cómo los afecta sexualmente a los cordobeses el ajuste?
La sexologa Silvia Aguirre entra en el debate y le da la razón al derrotado en el ballotage de hace cuatro años.
La profesional asegura que en los últimos dos años, en coincidencia con la profundización de crisis económica, se duplicó la cantidad de pacientes que acuden a pedirle ayuda porque no tienen ganas de tener relaciones íntimas.
“Cuando las personas se ven afectadas por preocupaciones, problemas económicos o situaciones adversas por supuesto esto se ve reflejado en el plano sexual. El ámbito íntimo necesita de una puesta de energía importante para poder funcionar bien y llevar adelante un buen encuentro. Se requiere de buena predisposición, ganas y justamente todo eso disminuye en épocas de crisis económicas o situaciones personales traumáticas”, explica.
Este es el primer tema de consulta entre los cordobeses. El segundo es la falta de una erección tal como se espera o imagina. Y el tercero la creciente cantidad de consultas por vaginismo, una dificultad de origen psicológico por la cual algunas mujeres no pueden recibir una penetración por la intensidad del dolor que sienten. Según Aguirre no es que haya más casos, sino que hay más información y las mujeres saben que existe una solución para mejorar la calidad de sus relaciones sexuales.
La profesional explica que todas estos problemas tienen un altísimo origen psicológico, salvo cuando se trata de personas de más de 60 años, donde sí puede haber causas físicas o biológicas.
Pero volviendo a la falta de ganas, no todo está perdido.
La profesional brinda algunas recomendaciones para recuperar la libido y las ganas de tener sexo: "Bajar el grado de autoexigencia, la presión que nos imponemos al creer que tenemos que poder seguir con un estilo de vida sexual maravilloso y pleno de tener relaciones sexuales dos o tres veces por semana”.